El último adiós a Dolores O’Riordan

Su distintiva voz puso música al funeral en Limerick, su ciudad natal

El último adiós a Dolores O’Riordan

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Dublín. - La voz de Dolores O’Riordan sirvió de banda sonora a la emotiva despedida que le brindó hoy su pueblo natal, Ballybricken (Irlanda), donde dio el concierto “más importante de todos”, el de la “vida misma”, subrayó el sacerdote en el funeral de la líder de The Cranberries, fallecida el 15 de enero.

Su féretro entró en la iglesia de Saint Ailbe al son del “Ave María” de Franz Schubert que interpretó y grabó con Pavarotti, y salió entre aplausos una hora, acompañada por el tema “When you are gone”, del disco “To the Faithful Departed”.

Durante la misa se escuchó a Dolores, cantando “Panis Angelicus”, lo que generó una atmósfera mágica gracias a su distintiva voz.

Decenas de parroquianos y vecinos, estuvieron presentes su madre Eileen, sus seis hermanos y los tres hijos de Dolores: Taylor, Molly y Dakota, fruto del enlace con Don Burton, de quien se separó en 2014 tras 20 años de matrimonio.

Frente al féretro se colocaron una guitarra y un disco de platino y otros objetos de su vida personal.

Durante la homilía, el sacerdote, Liam McNamara, recordó que O’Riordan no solo puso en el mapa a su “preciosa comunidad” de Ballybricken, sino a la ciudad de Limerick y a todo el condado, tras convertirse en un icono de la música mundial en los 90.

El sacerdote destacó que “su personalidad amable y bella voz le granjeó admiradores” en el terreno musical, pero con su arte y sus letras también “rescató de la oscuridad de la depresión”.

“Poseía una voz muy especial, un talento que valía su peso en oro. Y como la chica inteligente que era, sabía muy bien que debía desarrolla y usar ese talento”, recordó.