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En 2017, después de los migrantes de nacionalidad hondureña -que son el grueso de atención que pasan por el albergue- , los ciudadanos mexicanos fueron la segunda población que más se atendió en la Casa del Migrante, informó Rolando Maldonado Salas, cura y director de Cáritas Diocesanas.
Aunado a ello, el presbítero notificó que ese mismo comportamiento migratorio se contabilizó en enero pasado, donde los mexicanos continuaron siendo los segundos que más pasaron por el albergue arquidiocesano.
En entrevista, Maldonado Salas estimó que los migrantes nacionales principalmente provienen de las regiones sureñas de la República Mexicana, de entidades como Chiapas y Oaxaca.
El directivo de Cáritas Diocesanas de la Arquidiócesis de San Luis Potosí, comunicó que los ciudadanos procedentes de estos estados, llegan a ser víctimas de trata de personas o en cuestión laboral durante su camino de tránsito.
“De hecho, el año pasado cerramos con el segundo lugar con los mexicanos. Después de Honduras, fue la población de México la que estuvo en tránsito. Fue algo atípico que nunca se había registrado algo así”, evaluó.
Sobre la atención a las personas auxiliadas, el clérigo reportó que médicos particulares y enfermeras de Cruz Roja Mexicana brindan servicios de salud voluntarios, a fin de atender los requerimientos de la comunidad proveniente de Centroamérica y ahora del propio país.
