A-AA+
La autoridad de reliquias culturales de la provincia de Shaanxi, en el noroeste de China, enviará a los conservacionistas a reparar un guerrero de terracota que fue dañado mientras se exhibía en un museo de Filadelfia, Estados Unidos.
Según las autoridades estadunidenses al guerrero de terracota le fue robado el pulgar mientras se exhibía en el museo por un visitante.
La estatua de un soldado de caballería, que data de al menos 209 antes de Cristo, es una de las 10 estatuas de guerreros chinos de terracota que ahora se exhiben en el Instituto Franklin de Pensilvania. La exposición se extenderá hasta el 4 de marzo.
Wang Dongfeng, un experto en reparación de reliquias culturales en el Mausoleum Site Museum del emperador Qinshihuang en Shaanxi, dijo que se necesitan entre tres y cinco meses para restaurar un guerrero de terracota porque el proceso es complicado, destacó la agencia Xinhua.
Desde 2009, el equipo de Wang ha restaurado más de 100 guerreros de terracota.
El Centro de Promoción del Patrimonio Cultural de Shaanxi señaló que ha organizado más de 260 exhibiciones en el extranjero en los últimos 40 años y que nunca antes se había encontrado con una situación similar.
En tanto, las autoridades estadunidenses indicaron que Michael Rohana, de 24 años de edad, fue arrestado en relación con el robo y liberado bajo fianza de 15 mil dólares, además de entregar su pasaporte para evitar que salga del país mientras dura su juicio.
El personal del museo notó que el pulgar del guerrero había desaparecido el 8 de enero, y un agente especial del Equipo de Delitos de Arte de la Oficina Federal de Investigación (FBI) rastreó a Rohana días después.
Según la Plataforma de Publicaciones de Información sobre Reliquias Culturales Robadas de China, que se puso en línea a fines del año pasado, hasta el 60 por ciento de los casos de robo se han producido en museos e instituciones de reliquias históricas.
Sin embargo, la mayoría de los casos ocurrieron en los años ochenta y noventa. A medida que la tecnología de seguridad se desarrolló en los últimos años, se ha vuelto más difícil robar una reliquia cultural de un museo en China.
Según las autoridades estadunidenses al guerrero de terracota le fue robado el pulgar mientras se exhibía en el museo por un visitante.
La estatua de un soldado de caballería, que data de al menos 209 antes de Cristo, es una de las 10 estatuas de guerreros chinos de terracota que ahora se exhiben en el Instituto Franklin de Pensilvania. La exposición se extenderá hasta el 4 de marzo.
Wang Dongfeng, un experto en reparación de reliquias culturales en el Mausoleum Site Museum del emperador Qinshihuang en Shaanxi, dijo que se necesitan entre tres y cinco meses para restaurar un guerrero de terracota porque el proceso es complicado, destacó la agencia Xinhua.
Desde 2009, el equipo de Wang ha restaurado más de 100 guerreros de terracota.
El Centro de Promoción del Patrimonio Cultural de Shaanxi señaló que ha organizado más de 260 exhibiciones en el extranjero en los últimos 40 años y que nunca antes se había encontrado con una situación similar.
En tanto, las autoridades estadunidenses indicaron que Michael Rohana, de 24 años de edad, fue arrestado en relación con el robo y liberado bajo fianza de 15 mil dólares, además de entregar su pasaporte para evitar que salga del país mientras dura su juicio.
El personal del museo notó que el pulgar del guerrero había desaparecido el 8 de enero, y un agente especial del Equipo de Delitos de Arte de la Oficina Federal de Investigación (FBI) rastreó a Rohana días después.
Según la Plataforma de Publicaciones de Información sobre Reliquias Culturales Robadas de China, que se puso en línea a fines del año pasado, hasta el 60 por ciento de los casos de robo se han producido en museos e instituciones de reliquias históricas.
Sin embargo, la mayoría de los casos ocurrieron en los años ochenta y noventa. A medida que la tecnología de seguridad se desarrolló en los últimos años, se ha vuelto más difícil robar una reliquia cultural de un museo en China.
