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Ahora son los vecinos de la calle Zamarripa los que denuncian un hundimiento en el pavimento ubicado en la intersección con la calle Pintores, el cual desde hace 15 días apareció y se ha convertido en una peligrosa “trampa” para peatones y automovilistas.
Sandra Muñiz, habitante del lugar, señaló que el hoyanco de por lo menos 60 centímetros de ancho y un metro de profundidad, ya causó el primer accidente, cuando las llantas traseras de una camioneta que transitaba por la zona se hundieron a su paso.
Jorge Hernández manifestó que el hundimiento ya fue reportado a las autoridades, “pero es momento que no han acudido a revisar la situación”.
“Se reportó, pero no han hecho caso, el problema se hace más grave porque en la calle de Zamarripa únicamente hay tres lámparas que no dan la luz suficiente, lo que podría ocasionar que los choferes de unidades y los peatones puedan accidentarse”.
Ante la desatención de las autoridades, los vecinos de la zona se han dado a la tarea de colocar ramas de árbol, tierra y cubetas con palos a modo de advertencia, para que los conductores y transeúntes eviten caer en el hoyanco.
