A-AA+
Se prevé que 1.7 millones de mexicanos pueden desplazarse de las áreas costeras del Golfo y del Pacífico hacia Monterrey, Guadalajara y la capital del país por el impacto del cambio climático, advirtió el Banco Mundial (BM).
Estableció que si bien México tiene potencial para adaptarse al cambio climático, debe prestar atención a los efectos sobre los bolsillos de sus habitantes, porque puede provocar una oleada de migración interna hacia las grandes ciudades.
Una economía más fuerte, reducir la pobreza y la desigualdad, ayudarán a disminuir la migración interna por el cambio climático, de acuerdo con un nuevo informe titulado Marejada, prepararse para la oleada de migración interna causada por el clima, en el cual Etiopía, Bangladesh y México fueron seleccionados como ejemplos ilustrativos de lo que puede pasar en 2050 si no se hace nada al respecto.
El texto revela que los hogares que dependen de la agricultura son sensibles a eventos de sequía y a los impactos ciclónicos, lo que obliga a los miembros de la familia a buscar medios de vida alternativos en las ciudades y en el extranjero.
De acuerdo con el reporte, el empeoramiento del impacto del clima en tres regiones del mundo densamente pobladas puede hacer que más de 140 millones de personas se desplacen dentro de las fronteras de sus países para 2050, creando una inminente crisis humana y amenazando el proceso de desarrollo.
Del total proyectado, 86 millones de migrantes por motivos climáticos serán de África al sur del Sahara, 40 millones de Asia meridional y 17 millones de América Latina.
Para México, el escenario más pesimista estima que 1.7 millones de personas pobres se verán obligadas a migrar al interior del país, por la lenta manifestación de los impactos del cambio climático, que incluyen menor productividad de los cultivos, escasez de agua y por el aumento del nivel del mar.
En un escenario favorable, es probable que se muevan 1.4 millones por los impactos climáticos y en uno más inclusivo prevé que sean solamente 1.2 millones. Para ello es necesario un aumento sostenido en el desarrollo y una economía más fuerte, lo que significará una mayor capacidad de adaptación y de recursos financieros para dirigirse a las áreas y grupos más vulnerables, consideró el BM.
Crecimiento errático. Se reconoce que las reformas estructurales y el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) ayudaron a que México cambiara de ser una economía dependiente de ingresos por exportaciones petroleras, a una diversificada con fabricación orientada a la exportación. "La economía continúa funcionando bien, a pesar de los precios relativamente bajos del petróleo y la escalada de la violencia relacionada con las drogas, gracias a la fuerte demanda interna, baja inflación, expansión de crédito y el aumento del comercio internacional", destacó.
Consideró que los programas de reducción de la pobreza para las zonas rurales pueden aumentar la capacidad de adaptación al cambio climático en paralelo como alternativa a la movilidad.
Estableció que si bien México tiene potencial para adaptarse al cambio climático, debe prestar atención a los efectos sobre los bolsillos de sus habitantes, porque puede provocar una oleada de migración interna hacia las grandes ciudades.
Una economía más fuerte, reducir la pobreza y la desigualdad, ayudarán a disminuir la migración interna por el cambio climático, de acuerdo con un nuevo informe titulado Marejada, prepararse para la oleada de migración interna causada por el clima, en el cual Etiopía, Bangladesh y México fueron seleccionados como ejemplos ilustrativos de lo que puede pasar en 2050 si no se hace nada al respecto.
El texto revela que los hogares que dependen de la agricultura son sensibles a eventos de sequía y a los impactos ciclónicos, lo que obliga a los miembros de la familia a buscar medios de vida alternativos en las ciudades y en el extranjero.
De acuerdo con el reporte, el empeoramiento del impacto del clima en tres regiones del mundo densamente pobladas puede hacer que más de 140 millones de personas se desplacen dentro de las fronteras de sus países para 2050, creando una inminente crisis humana y amenazando el proceso de desarrollo.
Del total proyectado, 86 millones de migrantes por motivos climáticos serán de África al sur del Sahara, 40 millones de Asia meridional y 17 millones de América Latina.
Para México, el escenario más pesimista estima que 1.7 millones de personas pobres se verán obligadas a migrar al interior del país, por la lenta manifestación de los impactos del cambio climático, que incluyen menor productividad de los cultivos, escasez de agua y por el aumento del nivel del mar.
En un escenario favorable, es probable que se muevan 1.4 millones por los impactos climáticos y en uno más inclusivo prevé que sean solamente 1.2 millones. Para ello es necesario un aumento sostenido en el desarrollo y una economía más fuerte, lo que significará una mayor capacidad de adaptación y de recursos financieros para dirigirse a las áreas y grupos más vulnerables, consideró el BM.
Crecimiento errático. Se reconoce que las reformas estructurales y el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) ayudaron a que México cambiara de ser una economía dependiente de ingresos por exportaciones petroleras, a una diversificada con fabricación orientada a la exportación. "La economía continúa funcionando bien, a pesar de los precios relativamente bajos del petróleo y la escalada de la violencia relacionada con las drogas, gracias a la fuerte demanda interna, baja inflación, expansión de crédito y el aumento del comercio internacional", destacó.
Consideró que los programas de reducción de la pobreza para las zonas rurales pueden aumentar la capacidad de adaptación al cambio climático en paralelo como alternativa a la movilidad.