Despiden a sacerdote asesinado en Izcalli

Despiden a sacerdote asesinado en Izcalli

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Unas 2 mil personas se dieron cita en la catedral de Izcalli para despedir con aplausos al padre Rubén Alcántara Díaz, de 50 años, asesinado el pasado 18 de abril en el interior de la iglesia Nuestra Señora del Carmen, ubicada en la colonia Cumbria.
El obispo de la Diócesis de Izcalli, Francisco González, encabezó la misa de cuerpo presente para despedir al padre, que fue sepultado en el cementerio Los Cipreses, en Naucalpan.
"Es lamentable, no se vale", dijo María de los Ángeles Larios, vecina de la colonia Cumbria, donde prestaba servicio el sacerdote.
El padre David Vega, de la parroquia La Divina Providencia del fraccionamiento Los Morales, en Cuautitlán, lamentó el crimen.
"Mi amigo sacerdote, fue mi maestro. Él me invitó a trabajar en el Tribunal, estuvimos trabajando de cerca en la Diócesis de Cuautitlán, y posteriormente en Izcalli él me recibió en su comunidad para hacer mi servicio, para poderme titular. Nos quedamos sin palabras. Elevamos nuestras oraciones y que él, allá en el cielo, interceda por nosotros", dijo.
Raymundo Guzmán, diputado local con licencia, lamentó el homicidio del padre Rubén y recordó que en noviembre de 2015 otro sacerdote, de Bosques del Lago, también fue atacado con arma de fuego.
"El padre Rubén, con una gran vocación de servicio, de trabajo en la comunidad, y creo que desafortunadamente fue víctima de esta situación que se está viviendo", afirmó.
"Es urgente que se trabaje de forma responsable, coordinada, en temas de seguridad, y desde luego nos sumamos a la exigencia a la Fiscalía General para que dé con los responsables de este y muchos otros crímenes que siguen impunes, y que desgraciadamente son la gran mayoría en nuestro estado".
El padre Arturo Robles, quien presta servicio en el municipio de Melchor Ocampo, relató que el padre Rubén componía cantos religiosos, entre ellos La lámpara encendida.
"Lamentar la muerte de un compañero, un hermano sacerdote. Cuando son seres cercanos a uno siempre duele, hay consternación y más en la forma, las maneras en las que suceden estos hechos, es muy triste", expresó.
La Fiscalía de Justicia del Estado de México continúa con las investigaciones para esclarecer el homicidio del sacerdote, cuyo móvil al parecer no fue el robo, sino un ataque directo.