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Un rinoceronte de un zoológico suburbano de Chicago se sometió a lo que se cree fue el primer TAC realizado a un ejemplar de su especie. Y no fue una tarea fácil.
Layla tiene siete años y medio, pesa más de 1.000 kilos (2.300 libras) y vive en el zoo de Brookfield.
Según los responsables del zoológico, la tomografía era necesaria para diagnosticar una obstrucción en el conducto nasal de Layla que le provocaba problemas para respirar.
Como Layla es demasiado grande para llevarla al hospital del centro, se trasladó una máquina de TAC a la Casa de los Paquidermos.
En la operación se empleó una pala de carga, que levantó al animal y lo colocó sobre la mesa de operaciones. Los alrededor de 40 miembros del personal que ayudaron en el proceso practicaron antes con 2.300 libras de concreto.
Las imágenes de la tomografía revelaron la presencia de un tejido anormal cerca de un molar superior. Layla descansa tras la prueba y se someterá a una operación, explicó el zoo.
Layla tiene siete años y medio, pesa más de 1.000 kilos (2.300 libras) y vive en el zoo de Brookfield.
Según los responsables del zoológico, la tomografía era necesaria para diagnosticar una obstrucción en el conducto nasal de Layla que le provocaba problemas para respirar.
Como Layla es demasiado grande para llevarla al hospital del centro, se trasladó una máquina de TAC a la Casa de los Paquidermos.
En la operación se empleó una pala de carga, que levantó al animal y lo colocó sobre la mesa de operaciones. Los alrededor de 40 miembros del personal que ayudaron en el proceso practicaron antes con 2.300 libras de concreto.
Las imágenes de la tomografía revelaron la presencia de un tejido anormal cerca de un molar superior. Layla descansa tras la prueba y se someterá a una operación, explicó el zoo.
