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MATEHUALA.- Aunque en repetidas ocasiones la Secretaría de Salud ha señalado que el problema de control de los perros callejeros corresponde al Municipio, éste problema permanece sin solución porque la autoridad local simplemente lo ha ignorado.
Ayer por la mañana, un joven que transitaba por la calle de Chapultepec fue agredido por un perro, el cual lo agredió o lo mordió en dos ocasiones: una a la altura de las costillas y la otra en la pierna derecha.
De manera rápida intervino la Policía Municipal para auxiliar al joven de 18 años de edad, ya que este se encontraba indefenso y sin poder hacer nada para protegerse del ataque del animal.
Enseguida al lugar arribaron paramédicos de la Unidad Municipal de Protección Civil para atenderlo y fueron quienes se encargaron de su traslado a un hospital para que recibiera atención. También se analiza si el perro agresor tiene rabia.
Vecinos del lugar manifestaron que el perro agresor sí tiene dueño y a pesar de saber que su mascota es muy agresiva y arremete contra todo aquel que transita por la calle no hace nada por controlarlo o tenerlo encerrado en su propiedad.
Es probable que la autoridad le exija al dueño del can que se haga responsable por los daños que sufrió el joven, así como del costo de sus curaciones.
Ayer por la mañana, un joven que transitaba por la calle de Chapultepec fue agredido por un perro, el cual lo agredió o lo mordió en dos ocasiones: una a la altura de las costillas y la otra en la pierna derecha.
De manera rápida intervino la Policía Municipal para auxiliar al joven de 18 años de edad, ya que este se encontraba indefenso y sin poder hacer nada para protegerse del ataque del animal.
Enseguida al lugar arribaron paramédicos de la Unidad Municipal de Protección Civil para atenderlo y fueron quienes se encargaron de su traslado a un hospital para que recibiera atención. También se analiza si el perro agresor tiene rabia.
Vecinos del lugar manifestaron que el perro agresor sí tiene dueño y a pesar de saber que su mascota es muy agresiva y arremete contra todo aquel que transita por la calle no hace nada por controlarlo o tenerlo encerrado en su propiedad.
Es probable que la autoridad le exija al dueño del can que se haga responsable por los daños que sufrió el joven, así como del costo de sus curaciones.
