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El Instituto Nacional de Migración (INM) informa que, en coordinación con elementos de la Gendarmería de la Policía Federal, deportó a un ciudadano austriaco, requerido por las autoridades de su país por los delitos de fraude y falsificación de documentos.
Al huir de su país, Juergen “N” estableció su residencia en Cancún, Quintana Roo, donde se dedicaba a falsificar documentos oficiales, títulos de propiedad privada, entre otros; tenía la intención de abrir una empresa de seguridad privada con documentación apócrifa.
En un comunicado, el INM indicó que el extranjero, quien se encontraba administrativamente irregular en su situación migratoria en el país, contaba con múltiples armas de diversos calibres de uso exclusivo del Ejército en su domicilio, las cuales exhibía en sus cuentas personales de redes sociales.
El INM y la Policía Federal, a través del intercambio de información con el Buró Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI) y la Policía de Austria, obtuvieron los requerimientos jurídicos que el extranjero enfrentaba por diversos ilícitos cometidos, lo que originó su búsqueda internacional colocándose una ficha roja a través de Interpol.
Juergen “N” fue deportado a su país de origen con estricto apego a sus derechos humanos, tal como lo estipulan los tratados internacionales, para continuar con su proceso legal.
Al huir de su país, Juergen “N” estableció su residencia en Cancún, Quintana Roo, donde se dedicaba a falsificar documentos oficiales, títulos de propiedad privada, entre otros; tenía la intención de abrir una empresa de seguridad privada con documentación apócrifa.
En un comunicado, el INM indicó que el extranjero, quien se encontraba administrativamente irregular en su situación migratoria en el país, contaba con múltiples armas de diversos calibres de uso exclusivo del Ejército en su domicilio, las cuales exhibía en sus cuentas personales de redes sociales.
El INM y la Policía Federal, a través del intercambio de información con el Buró Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI) y la Policía de Austria, obtuvieron los requerimientos jurídicos que el extranjero enfrentaba por diversos ilícitos cometidos, lo que originó su búsqueda internacional colocándose una ficha roja a través de Interpol.
Juergen “N” fue deportado a su país de origen con estricto apego a sus derechos humanos, tal como lo estipulan los tratados internacionales, para continuar con su proceso legal.