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Entre noviembre de 2016 y abril de 2018, se registraron 17 feminicidios en San Luis Potosí cuyas víctimas fueron madres, según datos de la Comisión Estatal Ejecutiva de Atención a Víctimas.
Según la comisión, nueve ocurrieron en el municipio capitalino.
En Cerritos, Villa Hidalgo y Matehuala hubo dos, mientras que en Villa de Guadalupe y Rioverde ocurrió un caso.
Los datos de la CEEAV detallaron que en promedio cada mujer ultimada tenía dos vástagos, sin embargo, también había casos en donde solo era un hijo o en otros donde se contabilizaron hasta cuatro hijos.
Es decir, si se toma en cuenta el promedio estimado por la dependencia estatal, en la actualidad existen a nivel estatal 34 niñas, niños o adolescentes que perdieron a sus madres.
Aparte, Arely Torres Miranda, integrante de la Mesa Ciudadana de Seguimiento a la Alerta de Violencia de Género (AVG), reportó que en el seguimiento realizado a las muertes violentas de féminas que han sido divulgadas en la prensa, contabiliza este año cuatro madres asesinadas.
Según datos de la Procuraduría General de Justicia del Estado, en lo que va de 2018 se reportan 29 fallecimientos violentos de féminas, en los cuales, aseveró, se aplicó el protocolo de feminicidio.
La feminista detalló los siguientes casos: María Simona, fallecida el 29 de abril en Xilitla, quien fue asesinada por su hijo que padece una enfermedad mental; 21 de febrero, ataque a un defensor de oficio donde mueren su hermana y sobrina, pero se presume que tenía otro hijo, sin embargo, no hay confirmación.
Asimismo, el 24 de enero en el municipio de Rioverde, el asesinato de María Luisa a manos de su ex pareja quien luego se suicidó, dejando tres hijos de 16, 11 y uno de edad desconocida en la orfandad; y el 13 de enero el asesinato de María Lourdes, empleada de Conafe, quien tenía un hijo.
Referente a la falta de información sobre las víctimas y sus hijos, Torres Miranda dijo que “es un gran pendiente el tema de huérfanas y huérfanos de feminicidio (…) El asesinato de una madre bajo estas circunstancias, pues es un impacto muy fuerte para los niños y las niñas”.
Según la comisión, nueve ocurrieron en el municipio capitalino.
En Cerritos, Villa Hidalgo y Matehuala hubo dos, mientras que en Villa de Guadalupe y Rioverde ocurrió un caso.
Los datos de la CEEAV detallaron que en promedio cada mujer ultimada tenía dos vástagos, sin embargo, también había casos en donde solo era un hijo o en otros donde se contabilizaron hasta cuatro hijos.
Es decir, si se toma en cuenta el promedio estimado por la dependencia estatal, en la actualidad existen a nivel estatal 34 niñas, niños o adolescentes que perdieron a sus madres.
Aparte, Arely Torres Miranda, integrante de la Mesa Ciudadana de Seguimiento a la Alerta de Violencia de Género (AVG), reportó que en el seguimiento realizado a las muertes violentas de féminas que han sido divulgadas en la prensa, contabiliza este año cuatro madres asesinadas.
Según datos de la Procuraduría General de Justicia del Estado, en lo que va de 2018 se reportan 29 fallecimientos violentos de féminas, en los cuales, aseveró, se aplicó el protocolo de feminicidio.
La feminista detalló los siguientes casos: María Simona, fallecida el 29 de abril en Xilitla, quien fue asesinada por su hijo que padece una enfermedad mental; 21 de febrero, ataque a un defensor de oficio donde mueren su hermana y sobrina, pero se presume que tenía otro hijo, sin embargo, no hay confirmación.
Asimismo, el 24 de enero en el municipio de Rioverde, el asesinato de María Luisa a manos de su ex pareja quien luego se suicidó, dejando tres hijos de 16, 11 y uno de edad desconocida en la orfandad; y el 13 de enero el asesinato de María Lourdes, empleada de Conafe, quien tenía un hijo.
Referente a la falta de información sobre las víctimas y sus hijos, Torres Miranda dijo que “es un gran pendiente el tema de huérfanas y huérfanos de feminicidio (…) El asesinato de una madre bajo estas circunstancias, pues es un impacto muy fuerte para los niños y las niñas”.
