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Hirving Lozano y Javier Aquino/Foto: El Universal
Javier Aquino vivió casi todo el proceso mundialista de 2014. Cuando llegó Miguel Herrera, fue ignorado, hasta que la lesión de Luis Montes, un mes antes de la Copa del Mundo, lo hizo meterse entre los 23.
Cuatro años después, el oaxaqueño es uno de los infaltables en las convocatorias de Juan Carlos Osorio; por eso, tiene la autoridad para decir que si esta generación quiere ser considerada como la mejor de la historia, "tiene que demostrarlo en la cancha".
Con la base del Tricolor jugando en Europa, todos piden o exigen que el equipo dé al fin ese paso hacia la inmortalidad, pero una cosa es querer, y otra... "Un punto importante es el hambre de triunfo de cada uno. Jugadores que triunfan en Europa y que en la Liga MX marcamos diferencia. Es una decisión compleja el decir si ésta es la mejor o no. Eso, al final, se medirá en resultados".
Sin miramientos, señala: "Debemos demostrar antes de proclamarnos como la mejor Selección de México [en la historia]".
El volante toma aire y afirma que, para conseguir ese estatus, lo tienen todo a favor, comenzando por el cuerpo técnico que encabeza Juan Carlos Osorio. "Todos estamos convencidos del trabajo del cuerpo técnico. Es muy diferente al que hemos tenido antes", menciona.
Lo que el jugador de Tigres destaca es "su preocupación por cada circunstancia, más allá del partido, el analizar a detalle, el darnos las herramientas para estar al 100% en todos los aspectos. La verdad que es algo en lo que se ha mejorado respecto del proceso pasado, y reitero: estamos convencidos de su liderazgo y tratamos regresarle la confianza que nos brinda. Trataremos de darle algo más de lo que nos ha brindado".
Con todo lo que declara, parece que Javier no quedó muy contento con lo que se hizo en el proceso pasado, al mando del Piojo: "Me tocó estar en Brasil. Se hicieron cosas buenas, pero —en lo personal— me siento mucho mejor con este grupo, es una mezcla interesante de jugadores experimentados y jóvenes. Pienso que esta selección es más completa, más dinámica y más rápida".
Esa dinámica y esa rapidez tienen mucho que ver con la gente que juega por los extremos, como Hirving Lozano, Jesús Corona, Jürgen Damm y él mismo.
"Por las bandas, tenemos jugadores que pueden marcar diferencia. Creo que somos una selección que puede marcar diferencia por los costados, gracias a la habilidad y picardía del futbolista mexicano, acompañado del estado físico y mental que poseemos. Puede, al final, que sea una zona donde se pude marcar diferencia", puntualizó.
Chucky no siente la presión
Hirving Lozano es señalado a ser la figura de México en el Mundial de Rusia. Es el atacante más punzante que tiene Juan Carlos Osorio. Así de sencillo. Todos lo ponen como el salvador del equipo. Pero el Chucky pide calma, serenidad y paciencia, porque sabe que nadie es tan importante como todo el equipo.
"Estoy muy tranquilo. Mi familia, mis hijos, son el mejor apoyo que tengo. Lo que me toca es disfrutar el momento que vivo y entregarme al máximo; eso ayuda a que solito se den las cosas y ojalá se dé de la mejor manera", dice el delantero del PSV Eindhoven.
Los elogios que le llegan de todos lados los toma con calma: "Son cosas muy bonitas que hablen de uno, que digan cosas así, es algo especial. Pero lo que debo hacer es tomarlo de la mejor manera, enfocarse en lo que uno busca. Estoy concentrado en estar bien para llegar bien, y que hablen de ti...".
Damm sabe que es difícil quedarse
Se acerca el corte definitivo para dar a conocer la lista de los 23 jugadores de cara a la Copa del Mundo, y uno de los que tienen la soga al cuello es Jürgen Damm, porque hay varios elementos en su posición y podría ser uno de los cinco sacrificados.
Para el jugador de Tigres, la esperanza muere al último y trabajará para llenarle el ojo al técnico Juan Carlos Osorio: "Es complicado, porque hay jugadores de mucha calidad en selección. Están Tecatito [Corona], [Carlos] Vela, Chucky [Lozano]", declaró.
Javier Aquino vivió casi todo el proceso mundialista de 2014. Cuando llegó Miguel Herrera, fue ignorado, hasta que la lesión de Luis Montes, un mes antes de la Copa del Mundo, lo hizo meterse entre los 23.
Cuatro años después, el oaxaqueño es uno de los infaltables en las convocatorias de Juan Carlos Osorio; por eso, tiene la autoridad para decir que si esta generación quiere ser considerada como la mejor de la historia, "tiene que demostrarlo en la cancha".
Con la base del Tricolor jugando en Europa, todos piden o exigen que el equipo dé al fin ese paso hacia la inmortalidad, pero una cosa es querer, y otra... "Un punto importante es el hambre de triunfo de cada uno. Jugadores que triunfan en Europa y que en la Liga MX marcamos diferencia. Es una decisión compleja el decir si ésta es la mejor o no. Eso, al final, se medirá en resultados".
Sin miramientos, señala: "Debemos demostrar antes de proclamarnos como la mejor Selección de México [en la historia]".
El volante toma aire y afirma que, para conseguir ese estatus, lo tienen todo a favor, comenzando por el cuerpo técnico que encabeza Juan Carlos Osorio. "Todos estamos convencidos del trabajo del cuerpo técnico. Es muy diferente al que hemos tenido antes", menciona.
Lo que el jugador de Tigres destaca es "su preocupación por cada circunstancia, más allá del partido, el analizar a detalle, el darnos las herramientas para estar al 100% en todos los aspectos. La verdad que es algo en lo que se ha mejorado respecto del proceso pasado, y reitero: estamos convencidos de su liderazgo y tratamos regresarle la confianza que nos brinda. Trataremos de darle algo más de lo que nos ha brindado".
Con todo lo que declara, parece que Javier no quedó muy contento con lo que se hizo en el proceso pasado, al mando del Piojo: "Me tocó estar en Brasil. Se hicieron cosas buenas, pero —en lo personal— me siento mucho mejor con este grupo, es una mezcla interesante de jugadores experimentados y jóvenes. Pienso que esta selección es más completa, más dinámica y más rápida".
Esa dinámica y esa rapidez tienen mucho que ver con la gente que juega por los extremos, como Hirving Lozano, Jesús Corona, Jürgen Damm y él mismo.
"Por las bandas, tenemos jugadores que pueden marcar diferencia. Creo que somos una selección que puede marcar diferencia por los costados, gracias a la habilidad y picardía del futbolista mexicano, acompañado del estado físico y mental que poseemos. Puede, al final, que sea una zona donde se pude marcar diferencia", puntualizó.
Chucky no siente la presión
Hirving Lozano es señalado a ser la figura de México en el Mundial de Rusia. Es el atacante más punzante que tiene Juan Carlos Osorio. Así de sencillo. Todos lo ponen como el salvador del equipo. Pero el Chucky pide calma, serenidad y paciencia, porque sabe que nadie es tan importante como todo el equipo.
"Estoy muy tranquilo. Mi familia, mis hijos, son el mejor apoyo que tengo. Lo que me toca es disfrutar el momento que vivo y entregarme al máximo; eso ayuda a que solito se den las cosas y ojalá se dé de la mejor manera", dice el delantero del PSV Eindhoven.
Los elogios que le llegan de todos lados los toma con calma: "Son cosas muy bonitas que hablen de uno, que digan cosas así, es algo especial. Pero lo que debo hacer es tomarlo de la mejor manera, enfocarse en lo que uno busca. Estoy concentrado en estar bien para llegar bien, y que hablen de ti...".
Damm sabe que es difícil quedarse
Se acerca el corte definitivo para dar a conocer la lista de los 23 jugadores de cara a la Copa del Mundo, y uno de los que tienen la soga al cuello es Jürgen Damm, porque hay varios elementos en su posición y podría ser uno de los cinco sacrificados.
Para el jugador de Tigres, la esperanza muere al último y trabajará para llenarle el ojo al técnico Juan Carlos Osorio: "Es complicado, porque hay jugadores de mucha calidad en selección. Están Tecatito [Corona], [Carlos] Vela, Chucky [Lozano]", declaró.
