Se defiende a capa y espada

Morgan Freeman reitera sus disculpas y asegura que no agredió a ninguna mujer

Se defiende a capa y espada

A-AA+

Los Ángeles. - Morgan Freeman, que ha sido acusado por ocho mujeres de comportamientos abusivos o inapropiados, reiteró ayer sus disculpas y aseguró que no agredió a ninguna mujer.

“Pedí perdón el jueves y continuaré pidiendo perdón a cualquiera que haya podido molestar, aunque fuera involuntariamente”, señaló el artista en un comunicado.

“Pero también quiero ser claro: no creé entornos de trabajo inseguros. No agredí a mujeres. No ofrecí trabajos o ascensos a cambio de sexo. Y cualquier insinuación de que lo hice es completamente falsa”, añadió.

El actor dijo que está “devastado” porque sus 80 años de vida estén “en riesgo” de quedar desvirtuados por este asunto.

“Las víctimas de agresiones y acoso merecen ser escuchadas. Y necesitamos escucharlas. Pero no está bien equiparar horribles incidentes de agresión sexual con piropos o humor inapropiados”, opinó.

CNN publicó un reportaje detallando acusaciones de ocho mujeres contra el actor.

Entre los casos está el de una joven que comenzó a trabajar en el 2015 en “Going in Style”, Michael Caine y Alan Arkin, y según la cual lo que creía el trabajo de sus sueños derivó en meses de acoso por parte del actor.

En su testimonio lo acusa de tocamientos indeseados y comentarios diarios sobre su figura y vestimenta. En una de esas situaciones, trató de levantarle la falda varias veces mientras le preguntaba si llevaba ropa interior.

Arkin le pidió que parara y Freeman se sorprendió, sin saber cómo reaccionar, según dijo la mujer. Lo ocurrido la llevó a dejar el cine. “Eran comentarios constantes de mi aspecto”.

Otra mujer sostiene que Freeman la acosó a ella y a su asistente en el set de la cinta “Now You See Me” (2013) al hacer numerosos comentarios sobre su cuerpo.
“Sabíamos que si iba a estar por allí no debíamos llevar prendas que mostraran nuestros pechos, nuestros traseros... Es decir, no debíamos llevar nada ajustado”, indicó.

Tres periodistas aseguran haber recibido comentarios inapropiados por parte del intérprete durante los llamados “junkets”, días de atención a los medios antes del estreno de una cinta.

Al menos cuatro personas que trabajaron con el actor en la última década indicaron que ese comportamiento ocurría “repetidamente” de manera que hacía sentir incómodas a mujeres.

Las mujeres dijeron que nunca hicieron públicas sus quejas por miedo a perder su trabajo.

“Cualquiera que me conoce o que ha trabajado conmigo sabe que no soy alguien que ofenda intencionadamente o haga sentirse mal a los demás a propósito”, dijo el actor en su primera reacción.

“Pido disculpas a quienquiera que se haya sentido incómodo o que le haya faltado al respecto”.