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La inseguridad actual no se puede negar ni esconder, y menos cuando a diario los medios informativos dan a conocer hechos delictivos, sentenció Juan Jesús Priego Rivera, vocero de la Arquidiócesis de San Luis Potosí.
El sacerdote equiparó que al igual que en una enfermedad, si se conoce el diagnóstico del padecimiento puede atenderse el problema, aunque sea “doloroso” el proceso de atención.
El portavoz arquidiocesano recalcó que con negar una realidad, es decir, de la inseguridad que vive la entidad potosina, no se alivia ni se arregla la problemática social que padece la ciudadanía.
Priego Rivera asumió que San Luis Potosí ya forma parte de la violencia nacional, por lo cual, es necesario la realización de un diagnóstico al respecto en donde puedan definirse determinadas estrategias.
“Nuestros mensajes no quieren ser de pesimismo (...) Yo creo que la autoridad debe reconocer (alza delincuencial). No se vale que nada más digamos las autoridades. También nosotros tenemos mucho que hacer”.
Según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), en los primeros cuatro meses del presente año, la entidad potosina reporta 349 asesinatos,
Asimismo, reportes recientes del SESNSP revelaron que de octubre de 2015 a abril de 2018, San Luis Potosí acumula mil 800 homicidios, de los cuales, el 61 por ciento se consideraron dolosos.
