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Poco más de doscientos aficionados se dejaron sentir con porras y vivas en la Glorieta González Bocanegra y sus alrededores, como la avenida Venustiano Carranza, luego de la victoria de la Selección Mexicana ante Corea del Sur por marcador de 2 goles a 1, festejo que después de varias horas se disolvió cuando un grupo de “líderes” caminaron hacia el monumento a la Bandera para darlo por terminado.
Los vendedores de espumas y playeras hicieron su agosto al aprovechar la efervescencia del balompié, el deporte que mueve las masas, y que con el triunfo del Tri se reafirma que así lo es, por la gran cantidad de mexicanos que salen a festejar sus triunfos, al menos ya dos en este Mundial de Rusia 2018 ante Alemania y Corea.
Las espumas y banderas no faltaron, así como el cántico tradicional del Cielito Lindo que al unísono entonaron los potosinos ante la mirada de reto de los policías que resguardaban las calles y avenidas con rostro serio y seco, como mostrando su autoridad ante los felices aficionados, niños, jóvenes y adultos.
La cerveza espumosa no faltó, algunos ya entonados hasta la regalaban a sus “amigos” del momento, mientras que la vendedora de espumas ofrecía a 20 pesos el bote y de inmediato los papás se los compraron para continuar con la fiesta que sólo provoca el futbol.
Fue poco tiempo lo que duró el festejo de los más de doscientos aficionados, y para la gente que iba en auto y que vio obstruido su camino, agradecieron que no fuera más rato ya que el tráfico fue mucho. En fin, algunos festejaron con los “fiesteros” y uno que otro les mandaron saludos de esos que nadie quiere recibir.
Aunque México ganó, aun no hay nada definido y será hasta el próximo miércoles para saber si el Tri califica o regresa a casa, si es la primera de las dos opciones seguramente el festejo volverá a la Glorieta González Bocanegra.
Los vendedores de espumas y playeras hicieron su agosto al aprovechar la efervescencia del balompié, el deporte que mueve las masas, y que con el triunfo del Tri se reafirma que así lo es, por la gran cantidad de mexicanos que salen a festejar sus triunfos, al menos ya dos en este Mundial de Rusia 2018 ante Alemania y Corea.
Las espumas y banderas no faltaron, así como el cántico tradicional del Cielito Lindo que al unísono entonaron los potosinos ante la mirada de reto de los policías que resguardaban las calles y avenidas con rostro serio y seco, como mostrando su autoridad ante los felices aficionados, niños, jóvenes y adultos.
La cerveza espumosa no faltó, algunos ya entonados hasta la regalaban a sus “amigos” del momento, mientras que la vendedora de espumas ofrecía a 20 pesos el bote y de inmediato los papás se los compraron para continuar con la fiesta que sólo provoca el futbol.
Fue poco tiempo lo que duró el festejo de los más de doscientos aficionados, y para la gente que iba en auto y que vio obstruido su camino, agradecieron que no fuera más rato ya que el tráfico fue mucho. En fin, algunos festejaron con los “fiesteros” y uno que otro les mandaron saludos de esos que nadie quiere recibir.
Aunque México ganó, aun no hay nada definido y será hasta el próximo miércoles para saber si el Tri califica o regresa a casa, si es la primera de las dos opciones seguramente el festejo volverá a la Glorieta González Bocanegra.
