Juez español abandona pedido de extradición de Puigdemont por malversación

Juez español abandona pedido de extradición de Puigdemont por malversación

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Carles Puigdemont, expresidente catalán / Foto: Archivo
MADRID (AP) — Un juez del Tribunal Supremo español abandonó el jueves sus pedidos de extradición de seis políticos separatistas catalanes acusados de rebelión, entre ellos el expresidente catalán Carles Puigdemont.
La sentencia significó un fuerte revés para los intentos de España de reprimir el movimiento secesionista de la próspera región catalana y mantiene con vida un problema que el año pasado provocó la mayor crisis política en cuatro décadas.
Puigdemont huyó a Bélgica luego de un referendo por la independencia el 1 de octubre para evitar el arresto. Fue detenido en Alemania en marzo cuando viajaba de Finlandia a Bruselas y se cree que reside en Hamburgo.
El juez español retiró sus pedidos de extradición después que una corte alemana sentenció que Puigdemont no puede ser extraditado por rebelión, sino solamente por malversación de fondos públicos.
Puigdemont sostuvo que la decisión puso de manifiesto la “debilidad inmensa” de la causa contra los separatistas, nueve de los cuales están presos en España a la espera de juicio. El movimiento separatista los considera víctimas de persecución política.
“Hoy es un día para reclamar con más fuerza que nunca la libertad de los presos y presas políticos”, tuiteó Puigdemont tras conocer el fallo del juez Pablo Llarena.
Llarena dijo que la sentencia alemana revelaba “falta de compromiso” en la persecución de prófugos.
Llarena quiere que Puigdemont y sus aliados separatistas que huyeron del país que respondan a cargos de rebelión y sedición, además de malversación de dinero público.
Si Puigdemont y los demás fueran extraditados para responder por malversación, la justicia española solo podría juzgarlos por ese cargo, cuya pena máxima es de 12 años de prisión. La pena por rebelión puede llegar a 30 años.
En su fallo publicado el jueves, Llarena dijo que revocaba las órdenes de arresto internacionales contra los seis exfuncionarios prófugos, un hecho que el movimiento separatista consideró una victoria contra las autoridades centrales.
El vicepresidente primero del parlamento catalán, Josep Costa, tuiteó “Llarena KO”.
El abogado de Puigdemont, Jaume Alonso-Cuevillas, sostuvo en un tuit triunfal: “Parece que nos ha quedado un verano inmejorable”.
Los cargos derivan del referendo no autorizado que realizó el gobierno catalán el año pasado y de la posterior declaración unilateral de independencia aprobada por el Parlamento en Barcelona, controlado por los separatistas.
La declaración no obtuvo reconocimiento internacional, pero el enfrentamiento entre los poderes regionales en Barcelona y las autoridades nacionales en Madrid tuvieron gran repercusión mundial.
Una corte alemana dijo la semana pasada que permitiría la extradición de Puigdemont para ser juzgado por malversación. Pero añadió que Alemania no reconoce el cargo de rebelión, y que la ley contra la traición no se aplica porque las acciones de líder catalán “no se elevaron hasta ese nivel de violencia”.
Los seis prófugos deberían responder a los cargos aunque regresen voluntariamente a España.
Los otros prófugos aparte de Puigdemont son Antoni Comin, Meritxell Serret y Lluis Puig, quienes huyeron a Bélgica; Clara Ponsati, quien se encuentra en Escocia, y Marta Rovira, que se cree está en Suiza.