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Ciudad de México.- Parece que fue ayer cuando un joven argentino procedente de Boca Juniors llegó al futbol mexicano sin saber que escribiría páginas de oro.
Sin embargo, de aquel agosto del 2004 en que debutó en México con el Veracruz a la fecha ya pasaron 14 años y el gran Christian Giménez ya no es el atacante de 23 años sino de 37.
Con solo 64 minutos jugados el torneo pasado y sin disputar al menos uno en el actual, el Chaco sabe que llegó el momento de no aferrarse, sobre todo porque después de una prolífica carrera de 20 años no debe ser fácil padecer tanta banca, cuando aún podría aportar.
Algo similar pasa con el Conejo Pérez, quien solo accedió a continuar un semestre más con los Tuzos, para no dejar desguarnecido el puesto de segundo arquero. Sin embargo, como el Chaco sabe que el Apertura 2018 será el del adiós.
Sin embargo, de aquel agosto del 2004 en que debutó en México con el Veracruz a la fecha ya pasaron 14 años y el gran Christian Giménez ya no es el atacante de 23 años sino de 37.
Con solo 64 minutos jugados el torneo pasado y sin disputar al menos uno en el actual, el Chaco sabe que llegó el momento de no aferrarse, sobre todo porque después de una prolífica carrera de 20 años no debe ser fácil padecer tanta banca, cuando aún podría aportar.
Algo similar pasa con el Conejo Pérez, quien solo accedió a continuar un semestre más con los Tuzos, para no dejar desguarnecido el puesto de segundo arquero. Sin embargo, como el Chaco sabe que el Apertura 2018 será el del adiós.
