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El gobierno del estado de Nueva York presentó hoy una demanda contra la farmacéutica Perdue, productor de medicamentos entre los que destaca OxyContin, por su responsabilidad en propagar la crisis de adicción a los opioides en Estados Unidos.
Interpuesta por el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, y por la fiscal general del estado, Barbara Underwood, la demanda argumenta que Purdue promovió sus productos opioides como menos peligrosos en términos de abusos y adicción, comparados con otros productos.
La demanda busca la restitución de las ganancias obtenidas por Perdue, resultado de sus violaciones de la ley de Nueva York, así como recursos para sufragar costos de sanciones civiles y para reducir los daños infligidos por la empresa en el estado.
De acuerdo con la demanda, Perdue funcionó durante décadas operando bajo un esquema de "persistente conducta ilegal”, durante la que engañó a médicos y pacientes sobre los riesgos de sus opioides, incluido OxyContin, minimizando intencionalmente los riesgos.
Específicamente la demanda señala que Purdue realizó numerosas tergiversaciones sobre sus productos, incluido ocultar el vínculo entre el uso a largo plazo de opioides, el abuso y la adicción.
La empresa aparentemente minimizaba los riesgos y afirmaba falsamente que la abstinencia de sus productos puede manejarse fácilmente, y exageraba los riesgos de terapias alternativas para aliviar el dolor, en comparación con los opioides.
"La epidemia de opioides fue creada por distribuidores inescrupulosos que desarrollaron una industria de 400 mil millones, que inyecta la miseria humana a nuestras comunidades", afirmó Cuomo.
Por su parte, la fiscal Underwood subrayó que su investigación encontró "un patrón de engaño e imprudente desprecio por la salud y el bienestar de los neoyorquinos, mientras Purdue se llenaba los bolsillos al explotar deliberadamente a nuestras comunidades y alimentar una epidemia".
"Ahora exigimos a Purdue que rinda cuentas por esta conducta reprensible e ilegal. Nuestro trabajo no terminará con esta demanda: nuestra oficina continuará liderando la investigación multiestatal de fabricantes y distribuidores de opioides en todo el país", aseveró Underwood.
De acuerdo con las autoridades de Nueva York, Purdue contribuyó a la prescripción y uso excesivo de productos opioides, lo que detonó la epidemia de adicción que afecta a las comunidades del estado.
Sólo en Nueva York hubo tres mil 086 muertes por sobredosis de opioides en 2016. Dos mil 399 de esas muertes fueron el resultado de analgésicos opioides, incluidos los vendidos por Purdue, destacó el gobierno estatal.
Interpuesta por el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, y por la fiscal general del estado, Barbara Underwood, la demanda argumenta que Purdue promovió sus productos opioides como menos peligrosos en términos de abusos y adicción, comparados con otros productos.
La demanda busca la restitución de las ganancias obtenidas por Perdue, resultado de sus violaciones de la ley de Nueva York, así como recursos para sufragar costos de sanciones civiles y para reducir los daños infligidos por la empresa en el estado.
De acuerdo con la demanda, Perdue funcionó durante décadas operando bajo un esquema de "persistente conducta ilegal”, durante la que engañó a médicos y pacientes sobre los riesgos de sus opioides, incluido OxyContin, minimizando intencionalmente los riesgos.
Específicamente la demanda señala que Purdue realizó numerosas tergiversaciones sobre sus productos, incluido ocultar el vínculo entre el uso a largo plazo de opioides, el abuso y la adicción.
La empresa aparentemente minimizaba los riesgos y afirmaba falsamente que la abstinencia de sus productos puede manejarse fácilmente, y exageraba los riesgos de terapias alternativas para aliviar el dolor, en comparación con los opioides.
"La epidemia de opioides fue creada por distribuidores inescrupulosos que desarrollaron una industria de 400 mil millones, que inyecta la miseria humana a nuestras comunidades", afirmó Cuomo.
Por su parte, la fiscal Underwood subrayó que su investigación encontró "un patrón de engaño e imprudente desprecio por la salud y el bienestar de los neoyorquinos, mientras Purdue se llenaba los bolsillos al explotar deliberadamente a nuestras comunidades y alimentar una epidemia".
"Ahora exigimos a Purdue que rinda cuentas por esta conducta reprensible e ilegal. Nuestro trabajo no terminará con esta demanda: nuestra oficina continuará liderando la investigación multiestatal de fabricantes y distribuidores de opioides en todo el país", aseveró Underwood.
De acuerdo con las autoridades de Nueva York, Purdue contribuyó a la prescripción y uso excesivo de productos opioides, lo que detonó la epidemia de adicción que afecta a las comunidades del estado.
Sólo en Nueva York hubo tres mil 086 muertes por sobredosis de opioides en 2016. Dos mil 399 de esas muertes fueron el resultado de analgésicos opioides, incluidos los vendidos por Purdue, destacó el gobierno estatal.
