A-AA+
Si bien el clero perdona el intento de homicidio de una monja, se mantendrá la denuncia penal contra el hombre que atentó contra la referida afectada, anunció Juan Jesús Priego Rivera, vocero de la Arquidiócesis de San Luis Potosí.
El 11 de agosto por la noche, un hombre desconocido amagó con un cuchillo en el cuello a una monja en la Parroquia de Tequisquiapan, después huyó pero fue capturado por feligreses.
Argumentó que deben fincarse responsabilidades contra el imputado, ya que hubo premeditación, pues mediante un video difundido en redes sociales se observa al ahora detenido anunciando su atentado.
De acuerdo con el portavoz católico, la iglesia católica analizará las medidas de seguridad que puede tomar, en aras de evitar sucesos de esta índole u otros hechos delictivos en los centros de oración.
Priego Rivera expuso que si bien las autoridades determinarán si se trató de una agresión de un fanático religioso o enfermo mental, dedujo que se “desató” la intolerancia y pasión de fanatismo “que le hace mucho daño a México”, dijo.
“Para nosotros como iglesia, lo más sencillo, lo mejor, lo más caritativo y lo más cristiano es perdonar, sin embargo, no quisiéramos que volviera a ocurrir (un ataque de este tipo). Es difícil que conviertas los templos en celdas de seguridad”, señaló.
A su vez, Rubén Pérez Ortiz, párroco del citado templo, detalló que la denuncia se hizo por los delitos de portación de arma, intento de homicidio y lesiones contra la religiosa. “Esto habla de que vivimos cada día más en una sociedad violentada”.
Mencionó que si bien desde el año pasado se colocaron cámaras de videograbación en la iglesia, en días próximos se terminarán de instalar algunas que faltaban en la segunda planta del inmueble.
“Se decidió hacer la denuncia correspondiente dado que efectivamente es una persona que tiene problemas mentales, y por otra parte fanatismo religioso. Entonces, se conjuga y en cualquier momento puede agredir, y será la autoridad la que determine el cauce más adecuado para esta persona”, concluyó.
El 11 de agosto por la noche, un hombre desconocido amagó con un cuchillo en el cuello a una monja en la Parroquia de Tequisquiapan, después huyó pero fue capturado por feligreses.
Argumentó que deben fincarse responsabilidades contra el imputado, ya que hubo premeditación, pues mediante un video difundido en redes sociales se observa al ahora detenido anunciando su atentado.
De acuerdo con el portavoz católico, la iglesia católica analizará las medidas de seguridad que puede tomar, en aras de evitar sucesos de esta índole u otros hechos delictivos en los centros de oración.
Priego Rivera expuso que si bien las autoridades determinarán si se trató de una agresión de un fanático religioso o enfermo mental, dedujo que se “desató” la intolerancia y pasión de fanatismo “que le hace mucho daño a México”, dijo.
“Para nosotros como iglesia, lo más sencillo, lo mejor, lo más caritativo y lo más cristiano es perdonar, sin embargo, no quisiéramos que volviera a ocurrir (un ataque de este tipo). Es difícil que conviertas los templos en celdas de seguridad”, señaló.
A su vez, Rubén Pérez Ortiz, párroco del citado templo, detalló que la denuncia se hizo por los delitos de portación de arma, intento de homicidio y lesiones contra la religiosa. “Esto habla de que vivimos cada día más en una sociedad violentada”.
Mencionó que si bien desde el año pasado se colocaron cámaras de videograbación en la iglesia, en días próximos se terminarán de instalar algunas que faltaban en la segunda planta del inmueble.
“Se decidió hacer la denuncia correspondiente dado que efectivamente es una persona que tiene problemas mentales, y por otra parte fanatismo religioso. Entonces, se conjuga y en cualquier momento puede agredir, y será la autoridad la que determine el cauce más adecuado para esta persona”, concluyó.
