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Rioverde.- Persona con discapacidad e hipertensa acusó de abuso de autoridad y de robo de su vehículo a elementos de Seguridad Pública Municipal, tras ser trasladado en patrulla para encararlo con trabajadoras de una tienda de autoservicio donde se había presentado un robo.
Los agentes municipales, lo mantuvieron encerrado dos horas en una unidad de la corporación.
Sergio Díaz, quien cuenta con prótesis en ambas piernas y que padece de hipertensión dio a conocer que ayer por la mañana acudió a la tienda de autoservicio Aurrera a comprar víveres para su madre, porque saldría de viaje.
Relató que se acercó a un joven lavacarros y le pidió que lo ayudara con el mandado por lo que comenzó a realizar las compras e incluso el joven le solicitó que le comprara un jabón, a lo que él accedió.
Sin embargo, de repente el joven huyó y se activó la alarma de la tienda. Posteriormente se regresó a dejar cosas que había hurtado.
Tras el incidente, Sergio Díaz solicitó a la empleada de la tienda que checara su mercancia, a lo que la trabajadora le dijo que no tenía nada que ver y que, se podía ir.
Cuando se dirigía a su vehículo, otra empleada comenzó a tomarle fotografías a su unidad y le dijo que el muchacho iba con él, situación que negó.
Se dirigió a su domicilio ubicado en la esquina de Gama y Bravo, en donde comenzó a subir sus maletas, cuando arribaron 15 agentes de Seguridad Pública Municipal a bordo de cuatro patrullas y tres motocicletas, le preguntaron si era de su propiedad la unidad a lo que responde que sí.
Le informaron que el vehículo estaba involucrado en un robo, pero el contestó que fue un mal entendido en Aurrerá, pero los agentes se llevaron su unidad Toyota 2005.
Los policías le solicitaron que los acompañara con el gerente de la tienda para aclarar la situación. Les dijo que era discapacitado e hipertenso e incluso su hijo menor de edad fue trasladado a la patrulla a la fuerza.
Relató que los policías lo encararon con dos empleadas de la tienda, a quienes cuestionó si les había robado, pero al ver que no era señalado, la agente Jazmín Alvarado permitió que se retirara. Él le respondió que los llevaran a su casa porque de ahí los habían sacado y los subieron a la patrulla.
La oficial se puso a platicar con los trabajadores de la tienda por lo que lo mantuvo encerrado dos horas en la patrulla junto con su hijo. Él comenzó a sentirse mal, le habló a su abogado quien les señaló a la policía, que Sergio necesitaba de una ambulancia, por lo que los elementos los bajaron de la patrulla y los jalonearon.
Unos policías huyeron corriendo, mientras que otros lo hicieron a bordo de una patrulla.
La víctima adelantó que demandará a la corporación por abuso de autoridad y más grave aún, por robo de la camioneta ya que acudió a la comandancia, pero nadie le pudo dar información de su unidad.
Los agentes municipales, lo mantuvieron encerrado dos horas en una unidad de la corporación.
Sergio Díaz, quien cuenta con prótesis en ambas piernas y que padece de hipertensión dio a conocer que ayer por la mañana acudió a la tienda de autoservicio Aurrera a comprar víveres para su madre, porque saldría de viaje.
Relató que se acercó a un joven lavacarros y le pidió que lo ayudara con el mandado por lo que comenzó a realizar las compras e incluso el joven le solicitó que le comprara un jabón, a lo que él accedió.
Sin embargo, de repente el joven huyó y se activó la alarma de la tienda. Posteriormente se regresó a dejar cosas que había hurtado.
Tras el incidente, Sergio Díaz solicitó a la empleada de la tienda que checara su mercancia, a lo que la trabajadora le dijo que no tenía nada que ver y que, se podía ir.
Cuando se dirigía a su vehículo, otra empleada comenzó a tomarle fotografías a su unidad y le dijo que el muchacho iba con él, situación que negó.
Se dirigió a su domicilio ubicado en la esquina de Gama y Bravo, en donde comenzó a subir sus maletas, cuando arribaron 15 agentes de Seguridad Pública Municipal a bordo de cuatro patrullas y tres motocicletas, le preguntaron si era de su propiedad la unidad a lo que responde que sí.
Le informaron que el vehículo estaba involucrado en un robo, pero el contestó que fue un mal entendido en Aurrerá, pero los agentes se llevaron su unidad Toyota 2005.
Los policías le solicitaron que los acompañara con el gerente de la tienda para aclarar la situación. Les dijo que era discapacitado e hipertenso e incluso su hijo menor de edad fue trasladado a la patrulla a la fuerza.
Relató que los policías lo encararon con dos empleadas de la tienda, a quienes cuestionó si les había robado, pero al ver que no era señalado, la agente Jazmín Alvarado permitió que se retirara. Él le respondió que los llevaran a su casa porque de ahí los habían sacado y los subieron a la patrulla.
La oficial se puso a platicar con los trabajadores de la tienda por lo que lo mantuvo encerrado dos horas en la patrulla junto con su hijo. Él comenzó a sentirse mal, le habló a su abogado quien les señaló a la policía, que Sergio necesitaba de una ambulancia, por lo que los elementos los bajaron de la patrulla y los jalonearon.
Unos policías huyeron corriendo, mientras que otros lo hicieron a bordo de una patrulla.
La víctima adelantó que demandará a la corporación por abuso de autoridad y más grave aún, por robo de la camioneta ya que acudió a la comandancia, pero nadie le pudo dar información de su unidad.