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El entrenador José Mourinho acusó a los jugadores del Manchester United de relajarse y remató que la actitud difería con la suya, en el partido contra Wolverhampton (1-1), porque trató el cotejo como "una final de la Copa del Mundo".
Mourinho hizo cuatro cambios al equipo que derrotó a Young Boys por 3-0, en Berna el miércoles correspondiente a la Champions League, y hubo solo una alteración con respecto a la victoria previa de la Premier League en Watford.
"No es un buen rendimiento, no es un buen resultado", dijo el portugués. "Es un resultado justo, porque los Wolves jugaron como a mí me gusta jugar, que es como la final de la Copa del Mundo, esa es la actitud de que me gusta que mis equipos tengan cada partido y no tuvimos eso. Ellos tenían, nosotros no".
Fred abrió los carones en el minuto 18, pero Joao Moutinho lo igualó al 53´, y los Wolves aguantaron un merecido punto en Old Trafford. El mexicano Raúl Jiménez estuvo los 90 minutos en la cancha.
"La actitud hizo la diferencia", agregó Mourinho. "[Wolverhampton] estuvo en el juego desde el primer minuto, disputaron todas las bolas, cada segundo en el máximo de intensidad y deseo, y nosotros no lo hicimos, comenzamos mal, comenzamos ambas mitades con baja intensidad y es difícil ganar partidos cuando no estás ahí".
Cuando se sugirió que los jugadores del United tenían que aprender que cada juego es importante, Mourinho enfatizó: "Esto es algo que aprendes de niño en la academia. No necesitas experiencias al más alto nivel para aprender eso, eso es una ley básica del futbol.
"Tienes que jugar al máximo de tu potencial, el máximo de tu concentración, a menos que juegas en una liga tan débil contra oponentes realmente débiles y luego jugar un 30% de potencial es suficiente para ganar, ese no es el caso".
Con la igualada, el Manchester United bajó a la sexta posición, con 10 unidades. El Liverpool se mantiene líder con paso perfecto, 18 puntos, seguido por el Manchester City, 16, y Chelsea, con 15, pero con un partido menos.
