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San Luis Potosí es una de las pocas entidades del país que sin ser un destino de sol y playa tiene una gran oferta de actividades acuáticas, como en el municipio de Río Verde, en el que destaca la Media Luna, una laguna con más de 30 metros de profundidad.
La entidad es bien conocida por ser el destino surrealista del centro del país, con una amplia variedad cultural y gastronómica, aunque pocos turistas saben que en la zona se puede incluso bucear.
La Media Luna, ubicada en el Ejido del Jabalí, dentro del referido municipio, atrae a cientos de expertos en buceo que buscan nuevos y poco comunes lugares para practicar este deporte.
De acuerdo con un comunicado, se trata de un manantial con forma de media luna, de ahí su nombre, con aguas en tonos turquesa cristalina. En su interior cuenta con cavernas interconectadas que permiten practicar el buceo, e incluso, certificarse en el deporte.
Tiene seis nacimientos de agua y su forma es similar a un volcán invertido, está a diferentes profundidades, el más hondo tiene 36 metros.
En la Media Luna el agua adquiere una tonalidad azul con una visibilidad de 30 metros, cuya temperatura fluctúa entre los 27 y 30 grados durante todo el año, por lo cual se hace muy agradable la práctica del buceo recreativo.
Además, este emplazamiento natural alberga especies de tortugas, patos buzos y gran variedad de peces, así como un jardín acuático de nenúfares que nacen desde el fondo del manantial y emergen a la superficie.
La entidad es bien conocida por ser el destino surrealista del centro del país, con una amplia variedad cultural y gastronómica, aunque pocos turistas saben que en la zona se puede incluso bucear.
La Media Luna, ubicada en el Ejido del Jabalí, dentro del referido municipio, atrae a cientos de expertos en buceo que buscan nuevos y poco comunes lugares para practicar este deporte.
De acuerdo con un comunicado, se trata de un manantial con forma de media luna, de ahí su nombre, con aguas en tonos turquesa cristalina. En su interior cuenta con cavernas interconectadas que permiten practicar el buceo, e incluso, certificarse en el deporte.
Tiene seis nacimientos de agua y su forma es similar a un volcán invertido, está a diferentes profundidades, el más hondo tiene 36 metros.
En la Media Luna el agua adquiere una tonalidad azul con una visibilidad de 30 metros, cuya temperatura fluctúa entre los 27 y 30 grados durante todo el año, por lo cual se hace muy agradable la práctica del buceo recreativo.
Además, este emplazamiento natural alberga especies de tortugas, patos buzos y gran variedad de peces, así como un jardín acuático de nenúfares que nacen desde el fondo del manantial y emergen a la superficie.
