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Los Ángeles. - Sophie Turner llevó al límite su preparación para su papel en “X-Men: Dark Phoenix”.
La actriz vuelve a ser Jean Grey en la nueva película de los “X-Men” y ha querido penetrar tanto en sus personajes que ha estudiado e incluso ha intentado revivir los distintos desórdenes de la personalidad que tiene su papel.
“X-Men: Dark Phoenix” explora los orígenes de su temible álter ego conocido como “Phoenix’. Sophie Turner” es una de las protagonistas principales de esta entrega, es importante su peso en la trama.
Para ella era importante reflejar el conflicto interno al que se enfrenta una de las mutantes más poderosas del universo Marvel y para ello se propuso estudiar a fondo distintas enfermedades mentales que alteran el comportamiento y el pensamiento de una persona, tal y como le sucede a su personaje Jean Grey. “En cuanto me dijeron cuál iba a ser la premisa de la película, empezamos a compartir diferentes ideas y material sobre en qué basarlas. Simon Kinberg (el director) me dio un libro inmenso acerca de la esquizofrenia y además estuve navegando por la internet”, explicó la intérprete de “Juego de tronos” en una nueva entrevista a ScreenRant. Está muy concienciada en estos temas e incluso recordó el Día Mundial de la Salud Mental en sus redes sociales.
TRAMA
El documental y los libros le resultaron insuficientes para comprender qué sentiría una persona que escucha voces o que se despierta por la mañana sin saber qué hizo la noche anterior, como ocurre en el caso de los pacientes con desórdenes de personalidad múltiple, Sophie recurrió a las nuevas tecnologías para ir un paso más allá en su investigación: “Encontré una cosa bastante curiosa en YouTube que trataba de mostrar qué se siente al ser esquizofrénico. Básicamente eran voces que repetían lo mismo una y otra vez. Solía caminar por la ciudad con los cascos de música puestos escuchándolo para absorberlo todo y ver qué se sentía”.
HISTORIAS
Sophie Turner entiende la gran responsabilidad que supone protagonizar una de las historias de los cómics de “X-Men” más queridas por los fans por segunda vez en pantalla grande, aunque la primera vez fuese una subtrama de “X-Men: La decisión final”.
La actriz vuelve a ser Jean Grey en la nueva película de los “X-Men” y ha querido penetrar tanto en sus personajes que ha estudiado e incluso ha intentado revivir los distintos desórdenes de la personalidad que tiene su papel.
“X-Men: Dark Phoenix” explora los orígenes de su temible álter ego conocido como “Phoenix’. Sophie Turner” es una de las protagonistas principales de esta entrega, es importante su peso en la trama.
Para ella era importante reflejar el conflicto interno al que se enfrenta una de las mutantes más poderosas del universo Marvel y para ello se propuso estudiar a fondo distintas enfermedades mentales que alteran el comportamiento y el pensamiento de una persona, tal y como le sucede a su personaje Jean Grey. “En cuanto me dijeron cuál iba a ser la premisa de la película, empezamos a compartir diferentes ideas y material sobre en qué basarlas. Simon Kinberg (el director) me dio un libro inmenso acerca de la esquizofrenia y además estuve navegando por la internet”, explicó la intérprete de “Juego de tronos” en una nueva entrevista a ScreenRant. Está muy concienciada en estos temas e incluso recordó el Día Mundial de la Salud Mental en sus redes sociales.
TRAMA
El documental y los libros le resultaron insuficientes para comprender qué sentiría una persona que escucha voces o que se despierta por la mañana sin saber qué hizo la noche anterior, como ocurre en el caso de los pacientes con desórdenes de personalidad múltiple, Sophie recurrió a las nuevas tecnologías para ir un paso más allá en su investigación: “Encontré una cosa bastante curiosa en YouTube que trataba de mostrar qué se siente al ser esquizofrénico. Básicamente eran voces que repetían lo mismo una y otra vez. Solía caminar por la ciudad con los cascos de música puestos escuchándolo para absorberlo todo y ver qué se sentía”.
HISTORIAS
Sophie Turner entiende la gran responsabilidad que supone protagonizar una de las historias de los cómics de “X-Men” más queridas por los fans por segunda vez en pantalla grande, aunque la primera vez fuese una subtrama de “X-Men: La decisión final”.