Museo del Prado restaura "La fuente de Gracia" del taller de Van Eyck

Museo del Prado restaura La fuente de Gracia del taller de Van Eyck

A-AA+

El Museo del Prado presentó hoy la restauración de la obra “La Fuente de la Gracia”, del taller de Jan Van Eyck (1390-1441), una pieza enigmática y con muchos misterios sobre su creación que con este proceso tratan de ser aclarados.

La restauración realizada con el apoyo de la Fundación Iberdrola sobre la tabla, considerada una de las pinturas de arte flamenco más emblemáticas, habría sido pintada en los Países Bajos en el entorno del pintor, pero sin que él haya trabajado directamente en ella.

La pieza, un óleo sobre tabla, de 181 centímetros por 119 centímetros, habría sido pintada entre 1440 y 1445, por tanto terminada ya muerto Van Eyck, descubierta en el siglo XIX y desde entonces generó muchas dudas sobre su origen y llegada a España en el siglo XV.

El entonces rey Enrique IV regaló la pieza al monasterio jerónimo de Santa María del Parral en Segovia, antes de 1454, pero se desconoce cómo llegó al poder del monarca.

La pintura fue expropiada en los años treinta de siglo XIX y pasó al Museo de la Trinidad (el que después se integró al Prado), y al no ser obra directamente del pintor flamenco fue menos valorada por colecciones internacionales aunque objeto de estudio por su complejidad.

La pintura está realizada en tres planos: en el superior se encuentra Cristo en el trono, entre la Virgen y San Juan Evangelista, con el Cordero a los pies, de donde brota un manantial, seguido de un plano medio en que aparecen ángeles músicos y cantores.

En el plano inferior se representan a la izquierda reyes, nobles, papas, teólogos, y a la derecha varios judíos confusos y en fuga, uno de ellos con los ojos vendados.

El cuadro está basado en el políptico de los hermanos van Eyck en la catedral de San Bavón de Gante, aunque existen ciertas diferencias.

Con la restauración, además de retirar el barniz opaco y amarillento que cubría la pintura quería confirmar aspectos históricos e iconográficos.

Entre ellos, el hecho que la obra se concibió para el momento que vivía el reino de Castilla en ese tiempo, de conversión de la cuestión judía.

La restauración fue presentada por el director del Museo del Prado, Miguel Falomir; el director adjunto de Conservación e Investigación del Museo, Andrés Úbeda; el coordinador de Restauración y Documentación Técnica del Museo, Enrique Quintana.

Asimismo, por el presidente de la Fundación Iberdrola España, Fernando García; y el técnico de Conservación de Pintura Flamenca del Museo y comisario de la exposición que acompaña a la obra, José Juan Pérez Preciado.