Prohibición francesa del uso de velo islámico viola derechos humanos

Prohibición francesa del uso de velo islámico viola derechos humanos

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 La prohibición a las mujeres musulmanas  en Francia del uso del niqab (velo islámico) en público representa una violación de los derechos humanos y la libertad religiosa, denunció hoy el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (UNHRC, por sus siglas en inglés).

En un comunicado, el Comité denunció que Francia violó los derechos humanos de dos mujeres francesas que fueran procesadas y condenadas en 2012 por usar niqab, una prenda tradicional islámica, destinada a ocultar el rostro de las musulmanas en público, bajo la ley de 2010.

El UNHRC determinó que la prohibición penal general del uso del niqab en público introducido por la ley francesa perjudica de manera desproporcionada los derechos humanos de las mujeres musulmanas y la libertad de manifestar sus creencias religiosas.

En 2010, Francia adoptó una ley que estipula que "Nadie puede, en un espacio público, usar una prenda de vestir destinada a ocultar la cara", con lo que quedó prohibido el uso del velo islámico en público, principalmente la burka, prenda que cubre todo el cuerpo, incluyendo la cara, dejando solo una rendija para los ojos.

De acuerdo con el Comité de Derechos Humanos de la ONU, Francia no ha explicado adecuadamente hasta ahora los motivos por los qué era necesario prohibir el uso de la ropa tradicional de las mujeres musulmanas.

“En particular, al Comité no le convenció la afirmación de Francia de que la prohibición de la cobertura facial era necesaria y proporcionada desde el punto de vista de la seguridad o para alcanzar el objetivo de ‘vivir juntos’ en la sociedad”, destacó la deplaración.

El Comité reconoció que los Estados puede exigir que las personas mostrar sus rostros en circunstancias específicas para fines de identificación, pero consideró que una prohibición general del niqab era demasiado general para este propósito.

El UNHRC también concluyó que la prohibición, en lugar de proteger a las mujeres totalmente veladas, podría tener el efecto contrario de limitarlas a sus hogares, impedir su acceso a los servicios públicos y marginarlas.

"Las decisiones no están dirigidas contra la noción de laicidad, ni son un respaldo a una costumbre que muchos en el Comité, incluyéndome a mí mismo, consideran una forma de opresión de las mujeres", consideró Yuval Shany, presidente del UNHRC.

Más bien, explicó, las decisiones representaban la posición del Comité de que una prohibición penal general no permitía un equilibrio razonable entre los intereses públicos y los derechos individuales.

El caso fue el primero de su tipo en ser considerado por el Comité, que si bien regularmente recibe y rige sobre la aplicación práctica de los derechos civiles y políticos en casos individuales, hasta ahora no había considerado la cuestión legal que tenían el efecto de prohibir el velo islámico.

Según, la resolución del Comité, Francia debe informarle durante los próximos 180 días sobre las medidas que ha tomado para implementar su decisión, incluida la compensación de los dos afectadas y las aciones adoptadas para prevenir violaciones similares en el futuro, incluida la revisión a la polémica ley en cuestión.

Francia, que cuanta con la comunidad musulmana más grande de Europa, estimada en unos cinco millones, entregó en 2015 unas 223 multas a mujeres por llevar un velo islámico en público, según medios franceses.