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La condición de vulnerabilidad y exclusión de jóvenes mexicanos, detectada en una investigación, evidenció que presentan déficit escolar con un promedio de nueve años de estudio, la mayoría deserta en la preparatoria por cuestiones económicas y algo muy relevante, es que “encuentran aburrida” la escuela, explicó José Santos Zavala, investigador del Programa de Estudios Políticos Internacionales de el Colegio de San Luis (Colsan).
Además, el experto del Colsan advirtió que la insuficiencia de recursos económicos de alrededor de 80 mil jóvenes potosinos, los tiene en una condición vulnerable de ingresar al crimen organizado.
El académico participó en el informe “El futuro de los jóvenes pobres en México”, realizado por Centros de Investigación Conacyt, cuyo contenido entre otras cosas aborda la precariedad que vive la juventud mexicana en 13 entidades del país, que van desde desempleo, bajos salarios, pobreza y embarazos adolescentes.
Uno de los resultados del estudio, es que los “levantamientos” y desapariciones son frecuentes en las periferias de Monterrey y San Luis Potosí, pues los jóvenes relatan haber perdido hermanos y otros parientes, derivado de la vinculación con el tráfico de drogas.
La investigación fue elaborada por el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), los Colegios de San Luis (Colsan) y de Michoacán (Colmich) y el Instituto Mora.
Comentó que generalmente los planteles educativos, localizados en las zonas periféricas son espacios sin aulas dignas para tomar clases; hace calor o mucho frío, ruido externo, pupitres incomodos y sin adaptación para personas zurdas, entre otras carencias de infraestructura.
“Encontramos algo bien interesante. Que el joven sale de la escuela porque no le llama la atención, porque encuentra aburrida la escuela…así lo dicen de esa manera (…) No están dadas las condiciones físicas para que el niño se concentre”, exteriorizo.
Analizó que si a lo anterior se suma un docente falto de preparación y la carencia de cómo trasmitir de forma pedagógica la enseñanza, el niño se aburrirá, pero también puede encontrar mejor información en internet que en las aulas.
Además, el experto del Colsan advirtió que la insuficiencia de recursos económicos de alrededor de 80 mil jóvenes potosinos, los tiene en una condición vulnerable de ingresar al crimen organizado.
El académico participó en el informe “El futuro de los jóvenes pobres en México”, realizado por Centros de Investigación Conacyt, cuyo contenido entre otras cosas aborda la precariedad que vive la juventud mexicana en 13 entidades del país, que van desde desempleo, bajos salarios, pobreza y embarazos adolescentes.
Uno de los resultados del estudio, es que los “levantamientos” y desapariciones son frecuentes en las periferias de Monterrey y San Luis Potosí, pues los jóvenes relatan haber perdido hermanos y otros parientes, derivado de la vinculación con el tráfico de drogas.
La investigación fue elaborada por el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), los Colegios de San Luis (Colsan) y de Michoacán (Colmich) y el Instituto Mora.
Comentó que generalmente los planteles educativos, localizados en las zonas periféricas son espacios sin aulas dignas para tomar clases; hace calor o mucho frío, ruido externo, pupitres incomodos y sin adaptación para personas zurdas, entre otras carencias de infraestructura.
“Encontramos algo bien interesante. Que el joven sale de la escuela porque no le llama la atención, porque encuentra aburrida la escuela…así lo dicen de esa manera (…) No están dadas las condiciones físicas para que el niño se concentre”, exteriorizo.
Analizó que si a lo anterior se suma un docente falto de preparación y la carencia de cómo trasmitir de forma pedagógica la enseñanza, el niño se aburrirá, pero también puede encontrar mejor información en internet que en las aulas.
