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Emanuel N. conductor de un vehículo particular que fue golpeado por inspectores de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), denunció que hasta el momento ni Gobierno del Estado ni la dependencia le han brindado ningún tipo de apoyo.
“No ha habido respuesta alguna por parte de la SCT, ni por parte de gobierno y no me han dicho qué sucedió con estas personas”.
Dijo que el viernes se sometió a una cirugía, y que su situación económica se ha complicado, debido a que no ha podido acudir a laborar, “tuve que vender un patrimonio de mi esposa, para poder solventar los gastos médicos, pero hasta el momento no ha habido ningún acercamiento”.
Comentó que le hablaron del área de la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas (CEEAV), para platicar con él, pero que hasta el momento no ha habido más acercamiento.
Explicó que la cirugía fue a consecuencia de la fractura de nariz, que le fue provocada por la golpiza propinada por los inspectores de SCT, “la intervención me la hicieron el viernes pasado y hasta el momento nadie se ha acercado para responder por los gastos”.
Teme que la agresión quede en el olvido y que se vea, como dijo el titular de la SCT, Ramiro Robledo “como un incidente aislado, el cual él lo provocó, y eso no se vale”. “De la cirugía fueron 40 mil pesos, más gastos de radiografías”.
Emanuel N. manifestó que no teme a los rumores, relacionados con que el caso se puede revertir, “yo no voy a mentir y únicamente lo que se vio es lo que sucedió”.
“Si los señores dicen que tienen un vídeo diferente que lo muestren, y si yo actúe mal adelante”.
El quejoso solicitó a las autoridades ayuda para cubrir los gastos, porque económicamente está muy descontrolado.
“La SCT está actuando en la impunidad total, ya no saben ni quién es quién, y aunque yo hubiera sido Uber no es la forma de tratar a las personas, sin apegarse a los protocolos y violentando los Derechos Humanos”.
“No ha habido respuesta alguna por parte de la SCT, ni por parte de gobierno y no me han dicho qué sucedió con estas personas”.
Dijo que el viernes se sometió a una cirugía, y que su situación económica se ha complicado, debido a que no ha podido acudir a laborar, “tuve que vender un patrimonio de mi esposa, para poder solventar los gastos médicos, pero hasta el momento no ha habido ningún acercamiento”.
Comentó que le hablaron del área de la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas (CEEAV), para platicar con él, pero que hasta el momento no ha habido más acercamiento.
Explicó que la cirugía fue a consecuencia de la fractura de nariz, que le fue provocada por la golpiza propinada por los inspectores de SCT, “la intervención me la hicieron el viernes pasado y hasta el momento nadie se ha acercado para responder por los gastos”.
Teme que la agresión quede en el olvido y que se vea, como dijo el titular de la SCT, Ramiro Robledo “como un incidente aislado, el cual él lo provocó, y eso no se vale”. “De la cirugía fueron 40 mil pesos, más gastos de radiografías”.
Emanuel N. manifestó que no teme a los rumores, relacionados con que el caso se puede revertir, “yo no voy a mentir y únicamente lo que se vio es lo que sucedió”.
“Si los señores dicen que tienen un vídeo diferente que lo muestren, y si yo actúe mal adelante”.
El quejoso solicitó a las autoridades ayuda para cubrir los gastos, porque económicamente está muy descontrolado.
“La SCT está actuando en la impunidad total, ya no saben ni quién es quién, y aunque yo hubiera sido Uber no es la forma de tratar a las personas, sin apegarse a los protocolos y violentando los Derechos Humanos”.
