"Changoleón" fue profesor de la UNAM: la historia detrás del personaje

CIUDAD DE MÉXICO, abril 11 (EL UNIVERSAL).- "Changoleón", quien se hizo famoso por sus participaciones en el programa de Facundo no sólo es el personaje. Antes de ser conocido bajo este mote y vivir en la indigencia, Samuel García Quiroz se dedicó a dar clases.

Este 11 de abril se dio a conocer que "Changoleón", quien se hizo famoso en Toma Libre e Incógnito de Facundo, falleció en el mes de febrero y sus cenizas permanecen en la Casa del Artesano de Coyoacán.
El deceso fue confirmado por Facundo, quien a través sus redes sociales envió un mensaje en el que lamentó la muerte de Samuel García Quiroz: "Descansa en paz, viejo amigo".
El conductor y comediante compartió una fotografía junto a "Changoleón", misma que era utilizada para promocionar sus participaciones en su programa.
Aun cuando en un inicio se trató de un experimento para llamar la atención de la gente a su programa, "Changoleón" se convirtió en uno de los personajes más queridos del mundo de la comedia televisiva.
En una entrevista publicada por EL UNIVERSAL, "Changoleón" compartió detalles sobre su vida, cómo a qué se dedicaba antes de vivir en la indigencia.
El hombre comentó que fue maestro en la Facultad de Psicología de la UNAM, lugar al que previamente ingresó a estudiar en el 78.
Detalló que se desempeñó como maestro de Diagnósticos en Ciudad Universitaria, específicamente en el área de Psicología Clínica.
Posteriormente se dedicó al mundo de la artesanía con la elaboración de pulseras, oficio del que se sentía contento porque le permitía obtener ingresos para comer.
En dicha entrevista aclaró que a él no le importaba la fama, sino que para él representaba ganarse el pan de cada día.
El personaje de Samuel García Quiroz se hizo famoso por tener participaciones en los programas de Toma Libre e Incógnito de Facundo, luego de que éste lo encontró durante un recorrido por el centro de Coyoacán.
La producción del programa Incógnito contó a EL UNIVERSAL en 2005 que para grabar con él solían buscar por dos horas o más en todo Coyoacán para dar con su paradero.