Ecología de los Huracanes

La palabra huracán proviene de la palabra maya “Hura-kan” (dios de una perna –víbora) dada al Dios creador, quien causó una tormenta cataclísmica al final del primer capítulo del Popol Vu. Los mayas construían sus ciudades tierra adentro, entendiendo la ira que podía desatar “Hura-kán”.
Estas tormentas son llamadas de diferentes formas de acuerdo a donde se originan en el mundo, son llamados Huracán en el Atlántico Norte, en el Caribe y en el Pacífico nororiental y llamados tifones en el Pacífico noroccidental y llamados Ciclones Tropicales en el Océano índico y en el Pacifico suroeste.
Los huracanes son tormentas muy grandes que van girando, produciendo vientos de hasta más de 250 kilómetros por hora y en promedio pueden producir hasta 6oo trillones de watts de energía. Está formado por 3 secciones: 1. El Ojo: es un “hoyo” en el centro de la tormenta donde los vientos son ligeros y el cielo está poco nublado e incluso despejado, pueden medir de diámetro entre 48 – 200 km. 2. La Pared del Ojo: es un anillo de tormentas que giran alrededor del ojo, es aquí en donde los vientos y lluvias son más fuertes. 3. Bandas de Lluvia: son bandas de nubes y lluvia que se esparcen afuera de la pared del ojo y pueden medir cientos de kilómetros con tormentas e incluso tornados. De estas bandas, proviene la mayoría de la lluvia que cae anualmente en el estado de San Luis Potosí, por lo que los huracanes son benéficos, en su mayoría, para nuestro estado y los demás estados del centro de la república. La zona que genera la mayor parte de los huracanes está en las Islas Africanas de Cabo Verde, los cuales cruzan el atlántico y precipitan sus aguas en el Caribe y Norteamérica, por lo cual la mayoría de la precipitación pluvial que recibimos se genera en África y en su trayecto pro el Atlántico.
Hay dos ingredientes necesarios para que un huracán se forme: aguas oceánicas calientes, ya que océanos con agua caliente dan la energía que necesita una tormenta para transformarse en un huracán, necesitando temperaturas superficiales de 26°C o más. Y, Vientos que no cambien, tanto en velocidad como en dirección mientras va subiendo al cielo, ya que vientos que cambian constantemente, desgarran las tormentas.

Los huracanes son clasificados en 5 categorías de acuerdo a la Escala de Huracanes Saffir-Simpson:
l Categoría 1: vientos de entre 119 – 153 km/h
l Categoría 2: vientos de entre 154 – 177 km/h
l Categoría 3: vientos de entre 178 – 208 km/h
l Categoría 4: vientos de entre 209 – 251 km/h
l Categoría 5: vientos de más de 252 km/h

Las temporadas de huracanes:
En el Atlántico: 1 de junio – 30 de noviembre (coincidente con temporadas de lluvia en San Luis Potosí y estados vecinos)
En el Pacifico nororiental: 15 mayo – 30 de noviembre (coincide con las temporadas de lluvia en los estados mexicanos del Pacífico)
En el Pacifico noroccidental: junio – diciembre
En el Océano Índico: abril – diciembre

Desde 1953, estas tormentas han sido nombradas de una lista del Centro Nacional de Huracanes, los cuales ahora son actualizados por el comité internacional de la Organización Mundial Meteorológica, en donde solo eran nombrados con nombres de mujer, hasta 1979, cuando empezaron a alternar entre nombres masculinos y femeninos, usando 6 listas de nombres en rotación (la de 2015 será usada de nuevo en 2021), siendo únicamente alterada cuando un huracán fue demasiado mortal y costó la vida de muchas personas, por lo que ese nombre sería inapropiado de volver usar.

Las tormentas se están
volviendo más fuertes…
Como vemos, las tormentas necesitan calor para formarse, por lo que científicos piensan que, si los mares se están calentando cada vez más por el calentamiento global, esto significa extra calor en la atmosfera para nutrir a las tormentas, incluso, según datos de la NASA, ya existe evidencia de que los vientos de algunas tormentas ya están cambiando, pues según un estudio de 20 años con datos de altímetros (miden la altura de la superficie del mar) muestra que los huracanes se intensifican más rápido hoy en día que hace 25 años, específicamente, los huracanes Categoría 3 muestran vientos más veloces que en 1980. También, Kerry Emanuel, un experto en huracanes del Instituto Tecnológico de Massachusetts, creo un método para medir la energía total expendida por un huracán, y en 2005 demostró que los huracanes del Atlántico son 60% más poderosos que en 1970, con tormentas más duraderas y vientos topes aumentando un 25%.
Huracán Mitch (1998): uno de los más poderosos en la historia, azotando al Caribe y a Honduras, más de 10,000 personas perdieron la vida en América Central. Los daños fueron de $3.8 billones de dólares (70% del PIB anual de Honduras).
Huracán Ivan (2004): Categoría 5, pegó en Jamaica, Islas Caimán, Cuba y Costa del Golfo de EUA, llevado olas de hasta 5 metros, vientos de 195 km/h y 117 tornados. Daños de $14 billones de dólares.
Huracán Katrina (2005): Categoría 5, pegó en el Golfo de México y EUA. Daños estimados de $96 billones de dólares.
Huracán Wilma (2005): el último de los huracanes de ese año tan intenso, fue Categoría 5, rompiendo records las mayores bajas de presión en la historia del Atlántico y con el Ojo del huracán más pequeño que ha habido en un huracán. Pegó en la península de Yucatán, México y el sur de Florida, EUA. Daños estimados en $21 billones de dólares.
Huracán Dean (2007): Categoría 5, pegó Yucatán, México, y Haití. Dejando destrucción y llevándose la vida de 26 personas.
El año 2017 fue la temporada de huracanes más costosa de la historia con un daño estimado de $202 billones de dólares entre los 3 súper-huracanes que azotaron a Estados Unidos en menos de 1 mes, debido a las aguas del océano inusualmente calientes que se registraron ese año, lo anterior sucedió en el año en que el Presidente Donald Trump decretó que el calentamiento global “es invento de los chinos”:
Huracán Harvey: agosto 25 de 2017, Categoría 4, afectó especialmente a Texas. Precipitó 100 millones de millones de litros en Texas y Luisiana en 6 días y cobró la vida de al menos 82 personas.
Huracán Irma: septiembre 10, categoría 5 en el caribe y cuba, categoría 4 en Florida EUA donde el 35% de las casas fueron destruidas y el 65% quedaron con daños severos. Costó la vida de al menos 105 personas.
Huracán María: septiembre 20, categoría 5 en la Isla Dominicana, categoría 4 en Puerto Rico, categoría 3 en las islas del Caribe. Dejo sin electricidad a todo Puerto Rico, y fueron evacuadas 70,000 personas por peligro de una presa que podía romperse. Costó la vida de al menos 500 personas.

*En colaboración con Paulina González de la Garza.
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