Me podrán confirmar ustedes que la historia tiene la costumbre de repetirse en distintos períodos, e incluso entre diversos países. Y, fíjense, el poeta José de Espronceda (1808-1842) retrata en estas líneas un momento histórico muy parecido al que vivimos actualmente. Veamos.
“Oigo, patria, tu aflicción, y no entiendo por qué callas, viendo a traidores canallas, despedazar la nación.
Dando a un ingrato felón, estúpidas concesiones, están haciendo jirones, esta tierra milenaria, de gente ayer solidaria, y hoy podrida de ambiciones.
Lloras, porque te engañaron, los que lealtad prometieron, los mismos que te aplaudieron, y la Ley corroboraron.
Alevosos, traicioneros, bellacos y desleales, la convivencia entre iguales, rompen con su felonía, y han de acabar la porfía, en inmundos cenagales.
Buscando solo engañar, distorsionaron la historia, para turbar la memoria, de las gentes del lugar.
Anhelantes por medrar, con su estúpida insolencia, rompieron la convivencia, entre familias y amigos; requiere firme castigo su ruin malevolencia.
Un tipo poco honorable, quiso imponer sus ideas, con maneras maniqueas, fraudulentas, miserables, arteras y despreciables.
Medio milenio hermanados, no lo separa un tarado, dirigente provinciano, por mucho discurso vano, que largue desde su estrado.
¡Basta! Gritó el pueblo fiel, por toda la piel de toro. ¡Basta! Clamaron a coro, los españoles de bien. ¡Basta! Poned pie en pared a tanta provocación, y cortad la humillación, de estos cuatro hijos de perra.
¡No se trocea esta tierra, somos una gran nación!”.
Pues, oigan, igual y ésa viene a ser hoy nuestra realidad. ¿Acaso el hispano Espronceda vive en el México de este 2018?
Claro, en el origen y la evolución de todo ello destacan nuestros gobernantes, aunque cada uno de nosotros tiene parte de la responsabilidad. Y ningún individuo de cualquier partido nos va a sacar de estos atolladeros… No es cosa de “buenos” y “malos” e incluso algún farsante nos podría hundir aún más.
Nos queda, así, poner pie en pared a tanta provocación del más viejo PRI en el PRI y en MORENA (que también arropa extremistas del viejo PAN, como Manuel Espino y Germán Martínez). Sí, cada uno de nosotros tendrá que ver cómo, pero los mexicanos ya no podemos permitir más desgracias.
Está, pues, en nuestras manos. O en nuestros pies, digamos.
* EL SEGUNDO DEBATE NOS confirma, en esta época tan intensa, los perfiles de los candidatos y varias circunstancias del proceso electoral: Soberbia, ingenuidad, inseguridad, simulación, resentimiento, ignorancia, agresividad, pocas propuestas y otros puntos más sobrios (éstos de Anaya y, sobre todo, de Meade aunque difícilmente le alcanzarán al no deslindarse en serio de la corrupción en este sexenio).
Eso sí, en esta lucha contra reloj son ya evidentes el descontrol y la desesperación, al igual que la pretensión y la imbecilidad.
Don Amlo, un auténtico priista setentero, ha refrendado y promovido su gran capacidad trumpiana para endilgar apodos y utilizar consignas, eslóganes o descalificaciones… a falta de ideas y argumentos. Ya no sólo habla de un Desarrollo Estabilizador (1958-70) o de Producir lo que Consumimos (hasta 1982), sino también de una Alianza para el Progreso (1961-69) o de Caminos de Mano de Obra (1970-76).
En fin, igual llama la atención su limitada cultura refranera y de lemas simplistas (‘Primero los Pobres’, ‘Sin Maíz no hay País’, ‘La Mejor Política Exterior es la Política Interior’…) en su exitosa venta de soluciones rápidas y fáciles a problemas antiguos y complejos. Ahora mismo, en sus spots, nos dice literalmente: Va a haber “justicia social y mucha felicidad”. ¡Órale!
Meade le ha echado ganas y bastante sustancia, pero no iba a lograr más sin deslindarse de manera convincente de ciertas fallas del gobierno de EPN. Nunca fue apoyado desde mero arriba para que no tuviera que ser tan precavido… y será lamentable desaprovechar a alguien tan calificado.
Si acaso una enfermedad del sobrado puntero podría salvar a México de una peor desgracia, lo que además permitiría rescatar al propio Amlo y sus cercanos de una desventura personal, pues es muy improbable que encuentren la forma de corregir o compensar sus amenazantes sesgos y limitaciones.
* MIREN, CADA QUE ME topo con la perspectiva electoral de que un grosero y fraudulento populismo continúe su predominio en la capital del estado y su zona conurbada con más de 1.2 millones de habitantes, me vienen a la mente las palabras pronunciadas por el Gobernador Toranzo en el segundo Informe del Alcalde de Soledad, Ricardo Gallardo hijo, el 23 de septiembre de 2014.
Entre los elogios del priista al perredista: “formidable, progresista y consistente, que ha respondido a las necesidades sociales con fórmulas inteligentes… en la modernización y generación de justicia social”. Me sorprendió aún más aquello de que hubiera resuelto la problemática social del segundo municipio más poblado, y estos años me he preguntado quién fue tan cándido para escribirle eso.
En remedo del PRI nacional, que se especializó en crear monstruos con los que luego ya no sabe qué hacer (La Quina, Gordillo, Duarte, Amlo…), aquí ha sucedido algo parecido con el desbordamiento del poder económico y político de la cuestionada familia Gallardo. Y, ojo, puede ser que tanto allá como acá estén bastante asustados o desconcertados.
Bien. Y quizá podemos preguntarnos: En esta época ¿de qué estarán hechos los candidatos opositores y sus partidos en San Luis Potosí? Quiero suponer que ninguno de ellos es palero y podrán atraer una buena cantidad de votos e, incluso, considerar en su momento alguna útil declinación.
* EN EL FUTBOL PROFESIONAL se confirma el bajo nivel de la Liga MX que acaba de tener su final, ante el potencial de ocho países para ganar el ya cercano Mundial de Rusia (no están México ni el anfitrión: Alemania, España, Brasil, Francia, Inglaterra, Bélgica, Argentina y Portugal, tal vez en ese orden).
A las y los aficionados que no creen que nuestro fut de Primera División esté tan degradado, les sugiero ver en un rato la esperada final de la Champions de Europa (Liverpool-Real Madrid). Y, bueno, comparar un poco.
cpgeneral@gmail.com
@cpgarcieral
“Oigo, patria, tu aflicción, y no entiendo por qué callas, viendo a traidores canallas, despedazar la nación.
Dando a un ingrato felón, estúpidas concesiones, están haciendo jirones, esta tierra milenaria, de gente ayer solidaria, y hoy podrida de ambiciones.
Lloras, porque te engañaron, los que lealtad prometieron, los mismos que te aplaudieron, y la Ley corroboraron.
Alevosos, traicioneros, bellacos y desleales, la convivencia entre iguales, rompen con su felonía, y han de acabar la porfía, en inmundos cenagales.
Buscando solo engañar, distorsionaron la historia, para turbar la memoria, de las gentes del lugar.
Anhelantes por medrar, con su estúpida insolencia, rompieron la convivencia, entre familias y amigos; requiere firme castigo su ruin malevolencia.
Un tipo poco honorable, quiso imponer sus ideas, con maneras maniqueas, fraudulentas, miserables, arteras y despreciables.
Medio milenio hermanados, no lo separa un tarado, dirigente provinciano, por mucho discurso vano, que largue desde su estrado.
¡Basta! Gritó el pueblo fiel, por toda la piel de toro. ¡Basta! Clamaron a coro, los españoles de bien. ¡Basta! Poned pie en pared a tanta provocación, y cortad la humillación, de estos cuatro hijos de perra.
¡No se trocea esta tierra, somos una gran nación!”.
Pues, oigan, igual y ésa viene a ser hoy nuestra realidad. ¿Acaso el hispano Espronceda vive en el México de este 2018?
Claro, en el origen y la evolución de todo ello destacan nuestros gobernantes, aunque cada uno de nosotros tiene parte de la responsabilidad. Y ningún individuo de cualquier partido nos va a sacar de estos atolladeros… No es cosa de “buenos” y “malos” e incluso algún farsante nos podría hundir aún más.
Nos queda, así, poner pie en pared a tanta provocación del más viejo PRI en el PRI y en MORENA (que también arropa extremistas del viejo PAN, como Manuel Espino y Germán Martínez). Sí, cada uno de nosotros tendrá que ver cómo, pero los mexicanos ya no podemos permitir más desgracias.
Está, pues, en nuestras manos. O en nuestros pies, digamos.
* EL SEGUNDO DEBATE NOS confirma, en esta época tan intensa, los perfiles de los candidatos y varias circunstancias del proceso electoral: Soberbia, ingenuidad, inseguridad, simulación, resentimiento, ignorancia, agresividad, pocas propuestas y otros puntos más sobrios (éstos de Anaya y, sobre todo, de Meade aunque difícilmente le alcanzarán al no deslindarse en serio de la corrupción en este sexenio).
Eso sí, en esta lucha contra reloj son ya evidentes el descontrol y la desesperación, al igual que la pretensión y la imbecilidad.
Don Amlo, un auténtico priista setentero, ha refrendado y promovido su gran capacidad trumpiana para endilgar apodos y utilizar consignas, eslóganes o descalificaciones… a falta de ideas y argumentos. Ya no sólo habla de un Desarrollo Estabilizador (1958-70) o de Producir lo que Consumimos (hasta 1982), sino también de una Alianza para el Progreso (1961-69) o de Caminos de Mano de Obra (1970-76).
En fin, igual llama la atención su limitada cultura refranera y de lemas simplistas (‘Primero los Pobres’, ‘Sin Maíz no hay País’, ‘La Mejor Política Exterior es la Política Interior’…) en su exitosa venta de soluciones rápidas y fáciles a problemas antiguos y complejos. Ahora mismo, en sus spots, nos dice literalmente: Va a haber “justicia social y mucha felicidad”. ¡Órale!
Meade le ha echado ganas y bastante sustancia, pero no iba a lograr más sin deslindarse de manera convincente de ciertas fallas del gobierno de EPN. Nunca fue apoyado desde mero arriba para que no tuviera que ser tan precavido… y será lamentable desaprovechar a alguien tan calificado.
Si acaso una enfermedad del sobrado puntero podría salvar a México de una peor desgracia, lo que además permitiría rescatar al propio Amlo y sus cercanos de una desventura personal, pues es muy improbable que encuentren la forma de corregir o compensar sus amenazantes sesgos y limitaciones.
* MIREN, CADA QUE ME topo con la perspectiva electoral de que un grosero y fraudulento populismo continúe su predominio en la capital del estado y su zona conurbada con más de 1.2 millones de habitantes, me vienen a la mente las palabras pronunciadas por el Gobernador Toranzo en el segundo Informe del Alcalde de Soledad, Ricardo Gallardo hijo, el 23 de septiembre de 2014.
Entre los elogios del priista al perredista: “formidable, progresista y consistente, que ha respondido a las necesidades sociales con fórmulas inteligentes… en la modernización y generación de justicia social”. Me sorprendió aún más aquello de que hubiera resuelto la problemática social del segundo municipio más poblado, y estos años me he preguntado quién fue tan cándido para escribirle eso.
En remedo del PRI nacional, que se especializó en crear monstruos con los que luego ya no sabe qué hacer (La Quina, Gordillo, Duarte, Amlo…), aquí ha sucedido algo parecido con el desbordamiento del poder económico y político de la cuestionada familia Gallardo. Y, ojo, puede ser que tanto allá como acá estén bastante asustados o desconcertados.
Bien. Y quizá podemos preguntarnos: En esta época ¿de qué estarán hechos los candidatos opositores y sus partidos en San Luis Potosí? Quiero suponer que ninguno de ellos es palero y podrán atraer una buena cantidad de votos e, incluso, considerar en su momento alguna útil declinación.
* EN EL FUTBOL PROFESIONAL se confirma el bajo nivel de la Liga MX que acaba de tener su final, ante el potencial de ocho países para ganar el ya cercano Mundial de Rusia (no están México ni el anfitrión: Alemania, España, Brasil, Francia, Inglaterra, Bélgica, Argentina y Portugal, tal vez en ese orden).
A las y los aficionados que no creen que nuestro fut de Primera División esté tan degradado, les sugiero ver en un rato la esperada final de la Champions de Europa (Liverpool-Real Madrid). Y, bueno, comparar un poco.
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