La popularidad y el prestigio

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Invoco una vez más, para justificarme, la sabiduría de Renato Leduc: “Periodismo es reiteración”. Lo hago porque en la racionalidad de esta entrega me es necesario reiterar y corroborar que entre la Ecuación Corrupta y un grupo del crimen organizado dedicado a la extorsión, no hay diferencias sustantivas. Es decir, vienen a ser lo mismo.

La primera referencia a esta similitud la hicimos en nuestra columna inaugural de esta nueva etapa, el 7 de septiembre de 2017. Escribimos entonces:

“Con ese videoescándalo y su inmediata vinculación con el asunto Panavi, se produjo un salto de escala. Ya no se trataba de bufones irrespetuosos, de locos sublimados, de patanes con charola o de muertos de hambre desatados, sino de una buena veintena de delincuentes, extorsionadores voraces e implacables. Nuestros diputados y nuestras diputadas se convirtieron en la versión legislativa de la Delincuencia Organizada. Se constituyeron en un Cártel que lo mismo extorsionaba alcaldes, convertía la Auditoría Superior del Estado en su casa y caja chica; se hartaba de dietas, bonos, prebendas y compensaciones desmedidas; colonizaba numerosas dependencias del ejecutivo con sus contlapaches; proponía o aceptaba, para el caso es lo mismo, negocios en los que conservadoramente se embolsarían algunas decenas de millones de pesos.

“(Baste recuperar la narración del alcalde de Ébano sobre su encuentro con Enrique Flores en Av. Chapultepec -posterior al del video-, donde lo presiona para que acepte pagar los millones que le exigía la Ecuación Corrupta para limpiar sus cuentas, y que ante el titubeo de Crispín le exige en ese momento 10 mil pesos que le urgían. Y se los da. ¿Qué diferencia real hay entre esta conducta del diputado de marras y la de un sicario exigiendo el pago de derecho de piso a un comerciante?)”. Hasta aquí la cita.

¿Por qué la insistencia en el tema? Además de por su obvia gravedad y por el manto de impunidad que el gobernador Juan Manuel Carreras les ha obsequiado, porque nuevos datos corroboran que esa conducta de sicarios extorsionadores tuvo otros episodios, que por increíbles que parezcan son reales. Les platico:

Entre los presidentes municipales que los integrantes de la Ecuación Corrupta, Oscar Bautista Villegas, J. Guadalupe Torres Sánchez, Manuel Barrera Guillén y Enrique Flores Flores, escogieron para someterlos a su esquema de extorsión con las cuentas públicas, figuró el de Catorce, Francisco Daniel Calderón Coronado. Entre abril y mayo del año pasado, una vez que con la complicidad de la Auditoría Superior del Estado tenían un dictamen a modo para hacer atractivos sus servicios de limpieza, contactaron al citado alcalde y le exigieron una elevada suma para librarlo de cualquier problema con su cuenta. Calderón Coronado se negó, con el argumento irremontable de que no tenía dinero.

La gavilla de delincuentes consumados –Bautista, Torres, Barrera y Flores- no se dieron por vencidos y ubicaron en la cabecera de Real de Catorce unos terrenos municipales bien ubicados. Se los exigieron al alcalde catorceño en calidad de pago por sus servicios y se ofrecieron para tramitar ante notario público la escrituración respectiva. Calderón Coronado les dijo que sí, con tal de quitárselos de encima. Luego les dio largas.

Días antes de que se destapara el videoescándalo Crispín Ordaz-Enrique Flores (12 de junio 2017), el presidente municipal de Catorce se encontraba laborando en sus oficinas cuando le avisaron que lo buscaban los diputados Oscar Bautista, Lupe Torres y Enrique Flores, quienes llegaron acompañados de un notario público con todo listo para que Calderón Coronado estampara su firma y se consumara el despojo.

El Alcalde apenas podía creer aquello. Aparentando buena disposición, les dijo que lo esperaran unos minutos mientras concluía otro asunto urgente, y se escabulló no sabemos si por una puerta lateral o por una ventana. Andaban en su busca cuando apareció el famoso video y el patrimonio de Catorce se salvó del saqueo.

Decíamos la semana pasada que el problema con esta célula delictiva no es que haya sido corrupta sino que fue también y en niveles elevados corruptora, y mencionamos una docena de alcaldes a los que mostraron el camino para robar cuanto quisieran y luego salir impolutos en sus cuentas. Dejamos en el tintero reiterar que también corrompieron a buena parte de los funcionarios de la Auditoría Superior del Estado (los que afortunadamente causaron baja con el cambio de titular).

También nos faltó señalar que en el esquema armado por la Ecuación Corrupta para extorsionar a los alcaldes, jugaron un papel relevante la licenciada Sandra Elizabeth Anguiano Ramírez, Coordinadora de Auditorías Municipales, impuesta ahí por Oscar Bautista, de cuyo chofer era esposa, y Fernando Barrera Guillén, hermano de Manuel. Con diferentes nombramientos, este último era el encargado de recibir la documentación que enviaban las presidencias municipales para solventar sus observaciones, y “extraviaba” o “nunca recibía” las que así convenía para sus nefastos intereses.

Estamos hablando del mismo Oscar Bautista que el gobernador y jefe real del priismo potosino quiere hacer candidato a diputado federal. A Guadalupe Torres, Manuel Barrera y Enrique Flores no los puede hacer legisladores federales Juan Manuel Carreras porque son de otros partidos, pero si se los proponen en una alianza partidaria tenga usted por seguro que gustoso los apoyaría. Ya vimos que le encanta hacer bola con corruptos, protegerlos, apapacharlos y llevarlos de la mano a presumirle su amistad a José Antonio Meade Kuribreña.

¡Habrase visto!
Recién un operador priísta nos decía que será el sereno pero Oscar Bautista es muy popular en su distrito. Eso me hizo recordar la frase que Alejandro González Iñarritu pone en boca de uno de los personajes de su película Birdman: “Nunca hay que olvidar que la popularidad es la prima puta del prestigio”.

Cuidado con compromisos

Hacía finales del 2011, cuando Enrique Peña Nieto era el inminente candidato del PRI a la Presidencia de la República, el entonces gobernador Fernando Toranzo consultó con algunos de sus colaboradores cuál debería ser su compromiso de votos para EPN. Hizo suya la propuesta de que se comprometiera a conseguirle un voto más de los que él, Toranzo, había alcanzado en su elección.

Fernando Toranzo Fernández ganó la elección de gobernador en julio del 2009 con 435 mil 628 votos. Tres años después, Peña Nieto consiguió en San Luis Potosí 431 mil 402 sufragios.

A Toranzo, en su faceta de jefe priista, le faltaron escasos 4 mil 225 votos, menos del uno por ciento, para cumplir su compromiso.

Aquí conviene hacer una precisión: Peña Nieto fue un gran candidato, parecía un rockstar que se movía en olor de multitud. La reciente visita de José Antonio Meade no sirve para hacer comparaciones, ya que vino en calidad de precandidato, condición que le impone una serie de limitaciones que inevitablemente se reflejan en el alcance de los eventos que encabeza. Habrá que esperar a que regrese como candidato oficial para ver su capacidad de convocatoria y medir la capacidad de movilización de los partidos que lo postulan. Por lo pronto, no ha mostrado ni de lejos el arrastre peñanietista.

Con estos antecedentes y contexto, es un verdadero disparate que entre las dirigencias real y formal del Revolucionario Institucional se hable de lograr para JAMK 550 o, peor aun, 600 mil votos. Ni soñados.

Juan Manuel Carreras ganó la gubernatura en el 2015 con 380 mil 128 votos, 55 mil 590 menos que Toranzo. Su triunfo fue posible porque Sonia Mendoza, la abanderada del PAN, obtuvo 351 mil 352, que fueron exactamente 51 mil 90 menos que Alejandro Zapata en 2015, quien cosechó en total 402 mil 442.

Si bajo la jefatura de Carreras el priismo potosino se comprometiera con Meade Kuribreña en los mismos términos que Toranzo lo hizo con Peña Nieto, estaríamos hablando de unos muy escasos 381 mil votos. Una miseria.

Al final del día, la cifra más razonable para el compromiso tricolor estaría entre los extremos. Si aquí se consiguen unos 450 mil votos a favor de JAMK, los priistas potosinos se podrán dar por satisfechos; muy satisfechos. Proporcionalmente sería menos que para Peña, si se toma en cuenta que en los seis años transcurridos la Lista Nominal de Electores en San Luis Potosí ha crecido un 9.94 por ciento.

COMPRIMIDOS

  • Ya es sabido: si en la sesión extraordinaria que deberán celebrar antes del fin de mes los señores diputados no logran acuerdos para elegir los fiscales Anticorrupción y de Delitos Electorales, el Gobernador del Estado podrá designar a quien él quiera dentro de las respectivas ternas. Sea de una manera u otra, Juan Manuel Carreras habrá cometido un grave error por doble vía: llevar al más importante de esos cargos, el Anticorrupción que durará 7 años en ejercicio, a un empleado suyo hasta hace pocos días, aunque en el fondo le estará entregando tan delicadísima responsabilidad a Oscar Vera, que sentado en el sillón de su despacho privado debe estar relamiéndose los bigotes. ¿Alguien entiende esto?


 

  • La semana pasada dije una cosa que no era cierta y otra la malinterpreté. Rebeca Terán -que de cualquier forma no pasa ninguna prueba de control de confianza- no estuvo en la sesión urgente de la Comisión de Vigilancia del 19 de junio pasado, cuando se aprobaron al vapor los dictámenes de la ASE relativos a las cuentas públicas municipales del 2016. El tercer asistente además de Oscar Bautista y Lupe Torres fue Jorge Luis Díaz Salinas, otro afecto al dinero fácil. La segunda precisión es que la diputada Josefina Salazar acudió a dicha reunión y completó el quórum, porque había quedado de verse ahí con otras dos compañeras (Martha Orta y Lucila Nava), quienes nomás no llegaron. Ya registrada su asistencia, optó por quedarse y votar en contra. Si se hubiera ido ya no se rompía el quórum.


 

  • Más por instrucciones de sus dirigencias nacionales que por iniciativa propia, los liderazgos locales del PAN y el PRD, o séase Xavier Azuara y José Luis Fernández, llevan un par de semanas poniéndose de acuerdo para ir juntos en la elección municipal de esta capital, con Ricardo Gallardo Juárez. De buena fuente sabemos que las pláticas van avanzando y en cualquier rato se hace el anuncio oficial. Tienen hasta mediados de marzo para concretar la alianza. Si esto ocurre, al PRI le van a poner una madriza espantosa. Y ni que decir de la incómoda situación en que quedaría Xavier Nava. Sólo que lo postule el PRI.


 

  • El más siniestro de los funcionarios públicos llegados a San Luis en muchos años, también conocido como el “Rey del Moche”, según sus allegados se queda en San Luis aunque ya no estén sus padrinos mayores en la SEGOB, porque trae la chequera más veloz de la comarca. También se le identifica como Director del Centro SCT, mandamás de Interapas, concesionario de las grúas de Tránsito Municipal y mero mero de las obras públicas del gallardismo. ¡Pobre San Luis!.


Hasta el próximo jueves.