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Un indocumentado mexicano, acusado de matar a dos policías en Estados Unidos, amenazó hoy con asesinar a más agentes del orden, durante su comparecencia en una corte del norte de California.
Luis Enrique Monroy Bracamontes, quien podría enfrentar la pena de muerte, lanzó gritos en varias ocasiones durante una audiencia de sólo 12 minutos en la corte superior de Sacramento.
“Voy a enviarlos a todos al infierno”, amenazó Monroy Bracamontes en repetidas ocasiones, mismas que fue callado por el juez Steve White.
El mexicano, quien enfrenta un proceso judicial en el que está acusado de asesinar a dos agentes del área de Sacramento en 2014, estalló furioso cuando su hermano comenzó a testificar en el segundo día de su juicio.
Durante la breve audiencia, el acusado lanzó insultos y amenazas contra el juez, miembros del jurado y familiares de los policías asesinados.
El defensor público Norm Dawson argumentó que Monroy Bracamontes continuará actuando así porque no cree que el juicio sea importante, y que si es condenado a muerte, él asegura que "es inmune a la ejecución".
El juez White rechazó el intento de cambiar su declaración de culpabilidad o declarar una anulación de juicio, pero el acusado comenzó de nuevo con sus insultos.
"Más policías van a ser asesinados, pronto. Ojalá y hubiera matado a más", gritó mientras los agentes lo escoltaban fuera de la sala por orden del juez White quien resolvió que el juicio continuará y que Monroy Bracamontes lo seguirá por video.
El caso se lleva a cabo con dos jurados, uno para el caso de pena de muerte que involucra a Monroy Bracamontes, y el otro para su esposa, la estadunidense Janelle Monroy, quien enfrentaría una condena a cadena perpetua ya que también está acusada de haber participado en los asesinatos de los dos policías.
Monroy Bracamontes está acusado de matar al ayudante del sheriff de Sacramento, Danny Oliver, y desencadenar una persecución de horas que abarcó 50 kilometros y partes de dos condados, la cual terminó luego que disparó contra el alguacil del condado de Placer, Michael Davis Jr. a Davis, en Auburn.
Luis Enrique Monroy Bracamontes, quien podría enfrentar la pena de muerte, lanzó gritos en varias ocasiones durante una audiencia de sólo 12 minutos en la corte superior de Sacramento.
“Voy a enviarlos a todos al infierno”, amenazó Monroy Bracamontes en repetidas ocasiones, mismas que fue callado por el juez Steve White.
El mexicano, quien enfrenta un proceso judicial en el que está acusado de asesinar a dos agentes del área de Sacramento en 2014, estalló furioso cuando su hermano comenzó a testificar en el segundo día de su juicio.
Durante la breve audiencia, el acusado lanzó insultos y amenazas contra el juez, miembros del jurado y familiares de los policías asesinados.
El defensor público Norm Dawson argumentó que Monroy Bracamontes continuará actuando así porque no cree que el juicio sea importante, y que si es condenado a muerte, él asegura que "es inmune a la ejecución".
El juez White rechazó el intento de cambiar su declaración de culpabilidad o declarar una anulación de juicio, pero el acusado comenzó de nuevo con sus insultos.
"Más policías van a ser asesinados, pronto. Ojalá y hubiera matado a más", gritó mientras los agentes lo escoltaban fuera de la sala por orden del juez White quien resolvió que el juicio continuará y que Monroy Bracamontes lo seguirá por video.
El caso se lleva a cabo con dos jurados, uno para el caso de pena de muerte que involucra a Monroy Bracamontes, y el otro para su esposa, la estadunidense Janelle Monroy, quien enfrentaría una condena a cadena perpetua ya que también está acusada de haber participado en los asesinatos de los dos policías.
Monroy Bracamontes está acusado de matar al ayudante del sheriff de Sacramento, Danny Oliver, y desencadenar una persecución de horas que abarcó 50 kilometros y partes de dos condados, la cual terminó luego que disparó contra el alguacil del condado de Placer, Michael Davis Jr. a Davis, en Auburn.
