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La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) investiga como suicidio el deceso de Areli Lizbeth Salazar Segura, estudiante de la Facultad de Humanidades de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), quien presuntamente desapareció desde el domingo por la tarde en las inmediaciones de Toluca y fue hallada sin vida en un parque de la misma ciudad el miércoles 9 de mayo.
Según información de la dependencia, la joven de 26 años de edad no tenía rastros de violencia en el cuerpo; sin embargo, en la comisura de la boca se le observa una quemadura coincidente con la marca que deja una pistola disparada a poca distancia de la piel.
Su familia confirmó que la alumna presentaba un cuadro de depresión en los últimos días; sin embargo, la fiscalía de justicia mexiquense realiza las pruebas periciales de mecánica de lesiones y de hechos para tener un panorama claro y sobre lo que le pudo suceder a Areli.
Por el momento, las autoridades no descartan ninguna hipótesis; la línea de investigación más fuerte es el suicidio, toda vez que junto al cuerpo de la estudiante fue localizada un arma de calibre .22 mm y, en su mochila tenía una caja de balas del mismo calibre.
La alerta Odisea para su localización fue emitida el pasado lunes, luego de que la familia dejó de tener contacto con ella, pero la joven no tenía signos de violencia o señales de haber tenido algún conflicto físico con alguien en el parque Sierra Morelos, un sitio recreativo ubicado en la zona poniente de la capital mexiquense.
Además, donde fue encontrada no se localizaron indicios de que hubiera estado con alguna persona; sin embargo, la comunidad universitaria pidió a las autoridades resolver si sufrió alguna agresión.
Sería la segunda ocasión en este año que un estudiante de la UAEM se quita la vida; el primer caso fue el 7 de febrero, cuando la Dirección de Seguridad de la universidad recibió el reporte sobre el suicidio de un estudiante de 25 años de edad al interior del estadio Alberto Chivo Córdova.
Según información de la dependencia, la joven de 26 años de edad no tenía rastros de violencia en el cuerpo; sin embargo, en la comisura de la boca se le observa una quemadura coincidente con la marca que deja una pistola disparada a poca distancia de la piel.
Su familia confirmó que la alumna presentaba un cuadro de depresión en los últimos días; sin embargo, la fiscalía de justicia mexiquense realiza las pruebas periciales de mecánica de lesiones y de hechos para tener un panorama claro y sobre lo que le pudo suceder a Areli.
Por el momento, las autoridades no descartan ninguna hipótesis; la línea de investigación más fuerte es el suicidio, toda vez que junto al cuerpo de la estudiante fue localizada un arma de calibre .22 mm y, en su mochila tenía una caja de balas del mismo calibre.
La alerta Odisea para su localización fue emitida el pasado lunes, luego de que la familia dejó de tener contacto con ella, pero la joven no tenía signos de violencia o señales de haber tenido algún conflicto físico con alguien en el parque Sierra Morelos, un sitio recreativo ubicado en la zona poniente de la capital mexiquense.
Además, donde fue encontrada no se localizaron indicios de que hubiera estado con alguna persona; sin embargo, la comunidad universitaria pidió a las autoridades resolver si sufrió alguna agresión.
Sería la segunda ocasión en este año que un estudiante de la UAEM se quita la vida; el primer caso fue el 7 de febrero, cuando la Dirección de Seguridad de la universidad recibió el reporte sobre el suicidio de un estudiante de 25 años de edad al interior del estadio Alberto Chivo Córdova.