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La Copa Mundial Rusia 2018 dejará a la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA) una cifra récord de ingresos, debido en parte a la creciente demanda del mercado chino hacia este deporte.
El máximo evento futbolístico del orbe generará alrededor de seis mil 100 millones de dólares, cifra que rebasa en 10 por ciento a lo contemplado por el órgano rector del balompié mundial, destacó la agencia rusa Sputnik en su portal en internet, en referencia a información financiera de la FIFA.
Explicó que hay un aumento de dos por ciento al objetivo fijado de tres mil millones de dólares en la venta de derechos televisivos y un superávit de 200 millones a los mil 450 millones proyectados en acuerdos de patrocinios.
Ese crecimiento en el monto fijado, expuso, se debería en gran parte a una serie de acuerdos con empresas chinas, ya que siete de los 20 patrocinadores del torneo provienen del gigante asiático.
En contraste con los problemas que ha tenido la Federación para conseguir patrocinadores en el resto del mundo, tras el escándalo denominado "FIFAgate", China ha sido el aliado que necesitaba el organismo.
Este interés del mercado chino se debe a su presidente, Xi Jinping, quien en 2015 pidió a su nación erigir su propia economía deportiva, teniendo como prioridad al futbol.
El máximo evento futbolístico del orbe generará alrededor de seis mil 100 millones de dólares, cifra que rebasa en 10 por ciento a lo contemplado por el órgano rector del balompié mundial, destacó la agencia rusa Sputnik en su portal en internet, en referencia a información financiera de la FIFA.
Explicó que hay un aumento de dos por ciento al objetivo fijado de tres mil millones de dólares en la venta de derechos televisivos y un superávit de 200 millones a los mil 450 millones proyectados en acuerdos de patrocinios.
Ese crecimiento en el monto fijado, expuso, se debería en gran parte a una serie de acuerdos con empresas chinas, ya que siete de los 20 patrocinadores del torneo provienen del gigante asiático.
En contraste con los problemas que ha tenido la Federación para conseguir patrocinadores en el resto del mundo, tras el escándalo denominado "FIFAgate", China ha sido el aliado que necesitaba el organismo.
Este interés del mercado chino se debe a su presidente, Xi Jinping, quien en 2015 pidió a su nación erigir su propia economía deportiva, teniendo como prioridad al futbol.
