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En siete años, en San Luis Potosí fueron víctimas de secuestro casi dos mil 500 migrantes, pero no se abrió ninguna averiguación previa, señaló la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
Lo anterior queda expresado en el Tomo II del “Estudio sobre cumplimiento de impacto de las recomendaciones generales, informes especiales y pronunciamientos de la CNDH”, publicado ayer por la comisión.
Con datos de la Policía Federal, la CNDH indica que entre 2007 y 2014, se registraron dos mil 488 migrantes liberados de condiciones de secuestro. En total en el país, en ese periodo hubo 59 mil 292 casos.
San Luis Potosí ocupa la sexta posición en el conteo de casos.
La CNDH advierte sobre el alto grado de impunidad de las denuncias en lo general, lo que aplica en San Luis Potosí, pues de acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Migración, en ese periodo no se reportó ninguna averiguación previa por estos delitos. El antecedente más cercano data de 2004, cuando se abrieron 9 investigaciones.
La CNDH reprocha a las autoridades involucradas “la opacidad, discrecionalidad, falta de coordinación y homologación de los criterios para conformar un protocolo único de detección de personas migrantes víctimas de secuestro, así como una base de datos única”.
El organismo también consideró preocupante la falta de información de calidad sobre este delito, lo que refleja que el tema no es prioritario ni para la administración federal ni para los gobiernos estatales.
“Esto hace que cuestionemos el verdadero interés de las autoridades en el tema de derechos humanos y de seguridad, ya que al hacer invisible este fenómeno delictivo y las vejaciones que conlleva se está ignorando el respeto a la dignidad humana y a las garantías fundamentales de cualquier persona”, sentencia la mencionada comisión.
