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Foto: Archivo
Un juez impuso 26 años de prisión y el pago de una multa de 9 mil pesos para la reparación del daño a Julián Cornelio Martínez, de 37 años, culpable del delito de violación agravada en prejuicio de su hijastra, informó la Fiscalía Especializada de la Mujer en Chihuahua.
A través de un comunicado la dependencia señaló que los hechos sucedieron desde agosto de 2015 a febrero de 2016, cuando la pequeña tenía 7 años. La carpeta de investigación menciona que la última vez que Julián agredió a la menor fue el 28 de febrero de 2016, en un domicilio de la colonia Morelos.
En dicha ocasión "la madre de la menor salió a la tienda y cuando regreso se encontró que su hija estaba siendo abusada por su esposo". Al ser descubierto, el hombre salió del domicilio dejando su celular, mismo que la madre comenzó a revisar y encontró algunos videos y fotos donde la menor era violada por Julián, por lo que realizó la denuncia correspondiente.
Personal del área de medicina legal y psicología determinó que la niña presentaba daños físicos y emocionales, por lo que fue atendida junto a su madre por expertos en salud mental.
Un juez impuso 26 años de prisión y el pago de una multa de 9 mil pesos para la reparación del daño a Julián Cornelio Martínez, de 37 años, culpable del delito de violación agravada en prejuicio de su hijastra, informó la Fiscalía Especializada de la Mujer en Chihuahua.
A través de un comunicado la dependencia señaló que los hechos sucedieron desde agosto de 2015 a febrero de 2016, cuando la pequeña tenía 7 años. La carpeta de investigación menciona que la última vez que Julián agredió a la menor fue el 28 de febrero de 2016, en un domicilio de la colonia Morelos.
En dicha ocasión "la madre de la menor salió a la tienda y cuando regreso se encontró que su hija estaba siendo abusada por su esposo". Al ser descubierto, el hombre salió del domicilio dejando su celular, mismo que la madre comenzó a revisar y encontró algunos videos y fotos donde la menor era violada por Julián, por lo que realizó la denuncia correspondiente.
Personal del área de medicina legal y psicología determinó que la niña presentaba daños físicos y emocionales, por lo que fue atendida junto a su madre por expertos en salud mental.