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El proyecto de investigación para la explotación de pozos antiguos de crudo en el municipio de Ébano, se trasladó a la municipalidad de Altamira, Tamaulipas, informó Vladimir Alonso Escobar Barrios, investigador de la División de Materiales Avanzados del Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica (Ipicyt).
En junio de 2014, el entonces director del Ipicyt, David Ríos Jara, detalló que desde marzo de ese año iniciaron con los trabajos en las regiones huastecas de San Luis Potosí, Hidalgo y Veracruz; meses después anunció la inyección de vapor de agua para volver menos viscoso el hidrocarburo.
Escobar Barrios explicó que, si bien la intervención se trasladó al vecino estado por cuestiones de logística de la paraestatal, en las referidas zonas geográficas se realizaron algunos estudios referentes en materia geológica y caracterizaciones de aceites.
“Lo que hicimos fue una prueba, primero la caracterización del aceite y la parte geológica, y después un incremento de la temperatura en los yacimientos para que con esto (…) se abatiera la viscosidad y fluyera más rápido el aceite”, desglosó.
El científico refirió que las pruebas en la zona fueron exitosas, cuyos resultados están en manos de Pemex, instancia que se encargará de reactivar las actividades en caso de que así lo desee.
El también responsable técnico del proyecto, recalcó que en la investigación donde participa Petróleos Mexicanos (Pemex) no se utilizaron el llamado fracking o técnica de fractura hidráulica.
“Es un proyecto de investigación que está relacionado de cómo aumentamos la productividad de los pozos que se ubicaban, inicialmente en esa zona. Por cuestiones de logística y el usuario que finalmente era Pemex, se decidió trasladarlo a la parte de Altamira”, detalló.
En junio de 2014, el entonces director del Ipicyt, David Ríos Jara, detalló que desde marzo de ese año iniciaron con los trabajos en las regiones huastecas de San Luis Potosí, Hidalgo y Veracruz; meses después anunció la inyección de vapor de agua para volver menos viscoso el hidrocarburo.
Escobar Barrios explicó que, si bien la intervención se trasladó al vecino estado por cuestiones de logística de la paraestatal, en las referidas zonas geográficas se realizaron algunos estudios referentes en materia geológica y caracterizaciones de aceites.
“Lo que hicimos fue una prueba, primero la caracterización del aceite y la parte geológica, y después un incremento de la temperatura en los yacimientos para que con esto (…) se abatiera la viscosidad y fluyera más rápido el aceite”, desglosó.
El científico refirió que las pruebas en la zona fueron exitosas, cuyos resultados están en manos de Pemex, instancia que se encargará de reactivar las actividades en caso de que así lo desee.
El también responsable técnico del proyecto, recalcó que en la investigación donde participa Petróleos Mexicanos (Pemex) no se utilizaron el llamado fracking o técnica de fractura hidráulica.
“Es un proyecto de investigación que está relacionado de cómo aumentamos la productividad de los pozos que se ubicaban, inicialmente en esa zona. Por cuestiones de logística y el usuario que finalmente era Pemex, se decidió trasladarlo a la parte de Altamira”, detalló.
