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Moon Jae-in, presidente de Corea del Sur / Foto: Archivo
El presidente surcoreano Moon Jae-in inició su visita a naciones europeas con Corea del Norte en el centro de su agenda, y dentro de este punto, la invitación al Papa Francisco para que visite ese país.
Moon se entrevistó ya con su par francés Emmanuel Macron, a quien expuso la necesidad de reducir la intensidad de las sanciones que el Consejo de Seguridad ha impuesto a Pyongyang por su programa nuclear y de misiles, y este martes se dirigirá Italia.
El jueves el mandatario asiático estará en El Vaticano, donde la expectativa es la entrega de la carta que el líder norcoreano Kim Jong-un envía al jefe del Vaticano para que visite Corea del Norte.
Corea del Sur y del Norte están en un proceso de acercamiento que ha derivado en tres cumbres entre sus jefes de Estado en lo que va del año, sin olvidar el encuento de Kim con el presidente estadunidense Donald Trump en junio en Singapur.
Aunque en medio de dudas, Corea del Norte ha aceptado detener sus programas nuclear y de cohetes balísticos intercontinentales, y el propio presidente Trump reconoció este domingo que su reunión con Kim derivó en menos amenazas hacia Estados Unidos.
En ese marco la expectativa de una respuesta positiva a la invitación de Kim al pontífice es alta, aunque la agencia surcoreana Yonhap reproduce este martes la cauta respuesta que voceros pontificios han dado previo a la entrega de la invitación.
La víspera el presidente del gobernante Partido Democrático, Lee Hae-chan, afirmó que "había escuchdo" que el papa Francisco tiene el deseo de visitar Corea del Norte en la primavera de 2019.
Sin embargo, la agencia surcoreana señala este martes que la segunda de la oficina de prensa vaticana, Paloma García Ovejero, le respondió que no tenía ningún cometario al respecto, aunque entendía la expectación que existía sobre esa visita.
Fuentes de la sede católica agregaron a Yonhap que las condiciones para una visita papal son que existan invitaciones del jefe de Estado del país de que se trate y de la conferencia de obispos.
Como en Corea del Norte no hay conferencia de obispos los requisitos no se reunirían, pero la situación especial norcoreana podría ser tomada en cuenta.
El Papa Francisco ha subrayado que el diálogo y la reconciliación son necesarias para reducir la tensión en la península coreana, señalaron las fuentes consultadas por la agecia surcoreana.
El presidente surcoreano Moon Jae-in inició su visita a naciones europeas con Corea del Norte en el centro de su agenda, y dentro de este punto, la invitación al Papa Francisco para que visite ese país.
Moon se entrevistó ya con su par francés Emmanuel Macron, a quien expuso la necesidad de reducir la intensidad de las sanciones que el Consejo de Seguridad ha impuesto a Pyongyang por su programa nuclear y de misiles, y este martes se dirigirá Italia.
El jueves el mandatario asiático estará en El Vaticano, donde la expectativa es la entrega de la carta que el líder norcoreano Kim Jong-un envía al jefe del Vaticano para que visite Corea del Norte.
Corea del Sur y del Norte están en un proceso de acercamiento que ha derivado en tres cumbres entre sus jefes de Estado en lo que va del año, sin olvidar el encuento de Kim con el presidente estadunidense Donald Trump en junio en Singapur.
Aunque en medio de dudas, Corea del Norte ha aceptado detener sus programas nuclear y de cohetes balísticos intercontinentales, y el propio presidente Trump reconoció este domingo que su reunión con Kim derivó en menos amenazas hacia Estados Unidos.
En ese marco la expectativa de una respuesta positiva a la invitación de Kim al pontífice es alta, aunque la agencia surcoreana Yonhap reproduce este martes la cauta respuesta que voceros pontificios han dado previo a la entrega de la invitación.
La víspera el presidente del gobernante Partido Democrático, Lee Hae-chan, afirmó que "había escuchdo" que el papa Francisco tiene el deseo de visitar Corea del Norte en la primavera de 2019.
Sin embargo, la agencia surcoreana señala este martes que la segunda de la oficina de prensa vaticana, Paloma García Ovejero, le respondió que no tenía ningún cometario al respecto, aunque entendía la expectación que existía sobre esa visita.
Fuentes de la sede católica agregaron a Yonhap que las condiciones para una visita papal son que existan invitaciones del jefe de Estado del país de que se trate y de la conferencia de obispos.
Como en Corea del Norte no hay conferencia de obispos los requisitos no se reunirían, pero la situación especial norcoreana podría ser tomada en cuenta.
El Papa Francisco ha subrayado que el diálogo y la reconciliación son necesarias para reducir la tensión en la península coreana, señalaron las fuentes consultadas por la agecia surcoreana.