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La noche de este miércoles, policías municipales adscritos a la Unidad de Atención a Víctimas de Violencia Familiar y de Género atendieron el llamado de ayuda de una mujer que no podía controlar a su hija quien sufre una enfermedad mental.
La mujer de 53 años de edad les dijo a los oficiales que su hija de 28 años se encontraba encerrada en la cochera de su domicilio ubicado en calles de la colonia Tercera Chica, con un machete en una mano y en la otra un tubo; temía fuera a ocasionar una desgracia.
Los policías municipales escucharon los gritos de la mujer, que a decir de su mamá sufre alucinaciones y no habla de manera correcta, por lo que la señora les facilitó el acceso a la vivienda con la intención de controlarla y trasladarla a recibir atención médica.
Con el protocolo adecuado, los oficiales lograron contener la fuerza de la mujer y en compañía de su madre la trasladaron a la Clínica Everardo Neumann para seguimiento de salud.
La mujer de 53 años de edad les dijo a los oficiales que su hija de 28 años se encontraba encerrada en la cochera de su domicilio ubicado en calles de la colonia Tercera Chica, con un machete en una mano y en la otra un tubo; temía fuera a ocasionar una desgracia.
Los policías municipales escucharon los gritos de la mujer, que a decir de su mamá sufre alucinaciones y no habla de manera correcta, por lo que la señora les facilitó el acceso a la vivienda con la intención de controlarla y trasladarla a recibir atención médica.
Con el protocolo adecuado, los oficiales lograron contener la fuerza de la mujer y en compañía de su madre la trasladaron a la Clínica Everardo Neumann para seguimiento de salud.
