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MELBOURNE, Australia.- Frances Tiafoe se subió la manga derecha de su camiseta blanca, flexionó el bíceps y golpeó el músculo cinco veces. Después se golpeó el pecho y gritó: “¡Sí! ¡Vamos” ¡Vamos! ¡Vamos!”.
Perdonen los alardes del joven tenista estadounidense tras la que fue, al fin y al cabo, la mayor victoria de su incipiente carrera.
Con una desventaja de un set y un 3-0 en contra en el segundo, Tiafoe, de 20 años, reaccionó para doblegar el miércoles a Kevin Anderson, dos veces finalista de Grand Slams y quinto preclasificado, por 4-6, 6-4, 6-4, 7-5 en la segunda ronda del Abierto de Australia.
“Tuve que alcanzar otro nivel. Salí de un hueco enorme”, dijo Tiafoe, el número 39 en la clasificación de la ATP. “Se trata de competir. Los chicos son muy buenos. Se trata de cuánto quieras ganar. Y yo lo quería de verdad”.
Tiafoe avanzó a la tercera ronda junto a otro promisorio estadounidense que nunca había llegado tan lejos en el Melbourne Park: Taylor Fritz, de 21 años. Fritz levantó 12 de las 13 bolas de quiebre que afrontó para despachar 6-3, 6-7 (8), 7-6 (6), 7-6 (5) al francés Gael Monfils (30mo cabeza de serie).
El siguiente rival de Fritz será nada menos que Roger Federer, el bicampeón vigente de Australia y dueño de 20 títulos de Grand Slam.
“Crecí viendo jugar a muchos de los tenistas que toca enfrenta ahora. Me aburriría de contarles las veces que he visto las mejores jugadas de Monfils en YouTube cuando era un chico.
Y Fed, obviamente, siempre ha sido mi referente, siempre el mejor, el que lo gana todo”, dijo Fritz. “Es realmente fabuloso poder enfrentarme otra vez con él en una pista”.
