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De las nueve entidades con mayor monto bajo sospecha de lavado de dinero proveniente del robo de combustible, San Luis Potosí es la que tiene menos registros de tomas clandestinas, pues en dos años, apenas suma siete reportes, de acuerdo a cifras de Petróleos Mexicanos.
Información de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y de Petróleos Mexicanos apunta a que la gasolina de origen ilegal en la entidad no tiene un origen local.
El lunes, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador dio a conocer el avance de las investigaciones contra el “huachicoleo”. Entre otros datos, la UIF reveló que San Luis Potosí ocupa el noveno lugar entre las entidades en los que se han detectado mayores montos de recursos presuntamente vinculados con la venta de gasolina robada y el lavado de esos ingresos.
Serían, señaló la dependencia, 105.6 millones de pesos, detectadas en 384 operaciones realizadas entre 2017 y 2018.
En ese mismo lapso, Pemex detectó, según sus reportes anuales de tomas clandestinas sólo 7 instalaciones de “huachicoleros” diseñadas para el robo de combustible en la entidad. De ellas, seis se hallaron el año antepasado y sólo una en 2018. En junio, para ser precisos.
De las nueve entidades con mayores montos presuntamente irregulares detectados por la UIF, San Luis Potosí es la que menos tomas clandestinas tiene detectadas por Pemex.
Guanajuato, en los dos años, suma tres mil 399 tomas ilegales y presenta operaciones irregulares por 328.4 millones de pesos.
Puebla reportó 556.1 millones de pesos en operaciones sospechosas, y presenta tres mil 258 puntos de extracción ilegal.
Después de San Luis, Coahuila es el estado con menos puntos ilegales de “ordeña” de combustible, con 71, y 142.9 millones de pesos bajo sospecha de lavado. Después está la Ciudad de México, que registra movimientos irregulares por 503 millones de pesos y 174 tomas en su territorio.
