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Ciudad de México. - La actriz Patricia Reyes Spíndola aseguró que hace tiempo que no trabajaba con un equipo técnico y actoral tan profesional y comprometido con el cine nacional, como el que participa en “Me casé con un idiota”, actualmente en producción.
Entrevistada la noche de ayer en el marco del claquetazo oficial del filme, la actriz comentó que el cuadro de actores que la acompaña, dirigidos todos por Batán Silva, lo integran sus amigos Alfonso Herrera, Paulina Gaitan, y Andrés Almeida, así como “El Diablito” Mauricio Barrientos.
Explicó que su personaje es el de una guionista cinematográfica, “porque curiosamente, la película se trata del proceso creativo de un filme. El papel es divertido y el hecho de que sea comedia me entusiasma todavía más”, añadió Spíndola, quien dijo poner toda su experiencia en la cinta.
“Fue una suerte haber sido seleccionada para tomar parte en “Me casé con un idiota”, porque los actores y actrices, de diversas generaciones, tienen en común el amor al trabajo en el set fílmico”.
Sobre su personaje, señaló: “Esa guionista ha escrito 10 novelas y le llega el momento de incursionar en los guiones de cine. Al principio no confía mucho en ‘Iñaki Palacios’, quien va a ser su actor estrella en la película, pero después se da cuenta de que realmente es el gran histrión que todo el mundo asegura que es”.
En la trama, “Iñaki”, estrella de cine, y “Flor”, completa desconocida, inician un romance apasionado en plena filmación de la película, que sin que pase mucho tiempo termina en boda.
Pronto, “Flor” se da cuenta de que se casó con un completo idiota, al que confundió con el personaje de la película.
Tal situación desencadena acciones de comedia que generan risas. Luego, junto a la guionista de la película, “Iñaki”, listo para el mejor papel de su carrera profesional y de su vida personal, se “quiebra” la cabeza para idear un plan para recuperar al amor de su vida que, él lo sabe, es “Flor.
Patricia Reyes Spíndola destacó también que el desafío de hacer esta película, o cualquier otra, en México y el mundo, es que todos los productores tengan todo lo necesario para rodar cada escena y que los actores y actrices lleguen a la locación con sus líneas bien aprendidas para evitar pérdidas de tiempo.
