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Los dos supuestos policías municipales que fueron detenidos el sábado pasado, luego de un pase de revista en su base ubicada en el municipio de Ciudad del Maíz, donde se encontraron armas de fuego y cartuchos sin registro, así como droga, quedaron en libertad la noche de este martes.
Un Juez de Control del Sistema de Justicia Federal con sede en la ciudad de San Luis capital, determinó que los policías aprehensores violaron los derechos de los detenidos, pues el lugar de la detención era un domicilio particular y no mostraron una orden de cateo.
Como se informó en su momento, el director de la Policía Estatal, Raúl Alanís Beltrán, con apoyo de policías de su corporación así como personal militar comisionado al municipio de Ciudad del Maíz, efectuó una sorpresiva revisión al inmueble habilitado como base de un grupo de reacción de la Policía Municipal, conocidos con el mote de “talibanes”.
Al interior hablaron una escopeta, un rifle, cargadores y cartuchos para fusil de asalto AK47, dos armas cortas sin registro, un paquete o ladrillo de hierba verde y seca con características de la marihuana, así como varias dosis de cocaína y cristal.
Por eso los dos policías de guardia, Manuel Alejandro y Mario Alfonso, ambos originarios de Altamira, Tamaulipas, fueron detenidos y llevados ante un Ministerio Público Federal.
De manera extraoficial se supo que el director de la Policía Municipal, Eduardo Valdez, acudió hoy por la mañana a la base militar ubicada en la zona centro de Ciudad de Maíz, para advertirle a los soldados que levantaría cargos en su contra por la detención, y agregó que su jefe Arnulfo Urbiola ya había hablado con el Ministerio Público Federal de nombre Antonio, para desacreditar la detención ante el juez a fin de que éste pusiera en libertad a sus elementos.
