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Coatzacoalcos, Ver.- Habitantes del puerto de Coatzacoalcos, quienes durante más de 20 años han padecido la violencia, volvieron a salir a las calles para ser vistos por las autoridades e implorar que los salven de la delincuencia que los tiene asolados.
El asesinato, la semana pasada, de la empresaria Susana, quien fue secuestrada y decapitada porque sus familiares no lograron pagar su rescate, movilizó a una población que ha vivido bajo el yugo de diversos grupos delincuenciales, desde Los Zetas, el Cártel Jalisco Nueva Generación,
El Golfo y hasta reductos de bandas dedicadas al secuestro.
Según Semáforo Delictivo, de los mil 377 asesinatos vinculados al crimen organizado con registro en Veracruz durante 2018, 125 tuvieron lugar en Coatzacoalcos; además ocupó el primer lugar con nueve feminicidios de los 87 reportados en el estado.
Maestros, doctores, petroleros, comerciantes y empresarios forman parte de la larga lista de víctimas de la violencia en esa región y que año tras año han salido a las calles a manifestarse para pedir auxilio. Ahora lo hicieron en el arranque del gobierno del morenista Cuitláhuac García.
Aglutinados en el movimiento Coatzacoalcos Exige Paz, los ciudadanos marcharon para exigir a la autoridad estatal y federal seguridad para la región. Encabezados por empresarios, advirtieron que no se dejarán atemorizar por bandas de criminales.
Una empresaria expresó que existen personas que han huido de la ciudad dejándolo todo, pero que los que se quedan darán la batalla.
Los asistentes exigieron al presidente Andrés Manuel López Obrador y al gobernador del estado, Cuitláhuac García, implementar estrategias de seguridad en la región sureña y expresaron su apoyo a la decisión de las escuelas de parar actividades este viernes para externar su pesar.
“Exhortamos a todos los ciudadanos (…) que se unan a este movimiento [Coatzacoalcos Exige Paz] para hacer una frente común más sólido”.