Hermanas Hadid, Irina Shayk y Caitlyn Jenner desfilan para Versace en Milán




Las hermanas Bella y Gigi Hadid, Irina Shayk, Kendall Jenner y Caitlyn Jenner, la activista por los derechos de los transexuales, fueron algunas de las modelos que desfilaron hoy para Versace en la Semana de la Moda femenina de Milán.

La firma, fundada por Gianni Versace en 1978, recurrió a estos rostros tan conocidos del mundo de la moda y del espectáculo para presentar una colección llena de vestidos "bandage", ajustados, femeninos, de cuero negro y repletos de cuerdas y transparencias.

El negro fue el auténtico protagonista de la segunda parte de su desfile, ya que la primera estuvo centrada en los colores flúor, y el negro solo se vio interrumpido con algunos toques de color provenientes de broches dorados o detalles de pedrería en cinturones o botones de los abrigos.

Los vestidos ajustados a la silueta se acompañaron de botas altas con detalles en pedrería, o con zapatos de tacón, pero también hubo chaquetas ajustadas con mangas de encaje, que se llevaron como vestidos sobre medias también de encaje, y faldas de tejidos negros traslúcidos con bordados dorados.

La diseñadora y empresaria italiana Donatella Versace reservó a estas estrellas del mundo de la moda para el final de su puesta en escena, ya que la primera parte estuvo enfocada a los rosas, verdes y amarillos flúor.

Se pudieron ver gabardinas marrones con cuello de pelo rosa y verde, pantalones verdes acompañados de abrigos largos y abiertos en color salmón, faldas marrones de cuadros, con bordados verdes flúor, y bolsos verdes, amarillos y rosas intensos.

Y el estampado "pañuelo", que es tendencia esta temporada en camisas, pasó en la colección de Versace del próximo otoño-invierno a decorar chaquetas y pantalones.

La casa de complementos Tod'S propuso una colección con bolsos anchos y de asas cortas, en piel y color negro, bolsos bandolera pequeños granates y bolsitos en forma de saco, pero también hubo espacio para los cuadrados y los maletines, con estampado de leopardo.

Los botines bajos marrones, negros y verdes oscuros se alternaron con los zapatos clásicos en colores blancos y negro, y también con los zapatos de tacón, con detalles de pedrería.

Las modelos de Tod'S también lucieron guantes de piel marrones y cinturones finos, abrochados por debajo del pecho, que sirvieron para marcar la cintura con una función meramente decorativa.

Por su parte, la firma Iceberg optó por una colección en la que reivindicó los conjuntos formados por prendas de un solo color, ya sea azul, morado, blanco, negro o rosa, aunque jugando con sus diversas tonalidades e intensidades.

Así, una sudadera de color rosa pálido se conjuntó con una falda de tejidos vaporosos en tono rosa fucsia, y como calzado sugirió las botas altas, de cordones, en rosa oscuro.

Vestidos ajustados de azul klein y cuello "perkins" se ocultaron ligeramente bajo gabardinas azul marino, y camisas de un blanco crudo se combinaron con pantalones blanco crudo y abrigos de plumas en tonos casi beige.

Iceberg hizo un guiño a los cuentos de la factoría Disney y presentó jerséis negros con imágenes impresas de algunos de los enanitos de Blancanieves, de la bruja de Blancanieves o de la Bella durmiente.