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En 2018, la comercialización de prendas blindadas como chalecos, chamarras, blazers y abrigos en México, tuvo un incremento del 35 por ciento, de acuerdo con el Consejo Nacional de la Industria del Blindaje (CNIB).
En un comunicado, expuso que este aumento se debe a que en el mercado mexicano existen fabricantes y comercializadores que han excedido la calidad con productos de exportación.
Al respecto, Gabriel Hernández, presidente de la Comisión Ejecutiva del CNIB, explicó que en México la fabricación y comercialización de productos blindados para uso personal va en aumento, pues ya son muchas las empresas que protegen a sus ejecutivos (con prendas balísticas) y elementos de seguridad (con chalecos).
Refirió que en el caso de la seguridad privada, los principales clientes para chalecos balísticos son empresas de traslados de valores con un 38 por ciento, protección ejecutiva 35 por ciento e intramuros con el 15 por ciento.
Por su parte, en ropa civil el 12 por ciento que la utiliza son corporativos trasnacionales con operación en zonas de alto riesgo (Tamaulipas, Guerrero y Sinaloa) y empresarios de diversos giros que se protegen de la delincuencia común (Guadalajara, Ciudad y Estado de México, Puebla y Querétaro).
El directivo destacó que en los últimos cinco años, el segmento de blindaje corporal ha registrado una curva de crecimiento del 30 por ciento y en 2019 se estima un incremento entre 10 y 15 por ciento respecto al año anterior.
