CIUDAD DE MÉXICO.- “Rumba, zamba, mambo”, es el nombre de una de las canciones más famosas de finales de los 80 y que era interpretada por el grupo Locomía, una peculiar banda española recordada, no solo por su música, también por su estilo; pues solían usar coloridos atuendos y enormes abanicos con los que bailaban en sus presentaciones.
Mientras estuvo activa, la banda lanzó tres discos: “Hispavox: Taiyo”, “Locovox” y “Party Time”, con gran éxito, pero después de su desintegración, en 1997, los caminos de sus integrantes también tomaron rumbos separados. Francesc Picas, Santos Blanco y Frank Romero, fallecieron hace algunos años; mientras que aquellos que aún sobreviven, entre ellos Luis Font, no volvieron a brillar en el mundo de la música.
Font, miembro fundador de Loco Mía, de 55 años ha dado un drástico giro a su vida, y es que después de pisar algunos de los estadios más importantes del mundo, el cantante ahora se gana la vida trabajando en el metro de Madrid.
Tal cual sucede en la capital mexicana, Font, ayudado de un micrófono, bocina y su característico abanico blanco, recorre las diferentes estaciones del transporte público para interpretar sus antiguos éxitos a cambio de algunas monedas de los pasajeros.
En una entrevista que ofreció al programa español, “Socialité”, Font reveló que atravesó varios problemas económicos que lo llevaron al borde de la bancarrota y ahora los vagones del metro se convirtieron en su escenario.