Green Day ha despertado en la primera jornada del festival Son do Camiño, en Santiago de Compostela, el ánimo punk de toda una generación, que ha cantado y bailado los grandes éxitos de la banda californiana, en un concierto de más de dos horas en el que ha interpretado por completo los álbumes "Dookie" y "American Idiot".
La banda liderada por Billie Joe Armstrong era uno de los platos fuertes del primer día del festival, que en su quinta edición ha vuelto a optar por traer a la capital de Galicia un cartel muy ecléctico, para todas las edades y gustos.
Tras los guitarreos ágiles de los murcianos de Arde Bogotá, banda revelación a la que los asistentes corearon en temas como "Los Perros" o "Antiaéreo"; y el sonido latino del artista de Medellín, J. Balvin, uno de los grandes del reggaeton que no ha defraudado al público al entonar "Mi gente" o "La canción"; ha llegado el turno de Green Day.
Aunque parecía que el sol no terminaba de salir, finalmente ha lucido radiante en un anfiteatro por el que han pasado más de 42.000 personas, que han vibrado en todas y cada una de las actuaciones.
La expectación era mayúscula, ya que las entradas para el primer día del festival llevaban meses agotadas y es que allá por noviembre, cuando salieron a la venta los primeros 30.000 abonos, desaparecieron en unas horas. Los responsables, Green Day, los únicos anunciados en un cartel que aún entonces estaba por desvelarse.
Ha sido sonar los primeros acordes de "American Dream", de su nuevo álbum "Saviors" y el público ha conectado de forma instantánea. Armstrong, con camisa de rayas negra y roja, pelo rubio de punta y guitarra colorida ha salido junto a Mike Dirnt (bajo y coros) y Tré Cool (batería y coros) y ha derrochado su habitual energía sobre el escenario.
"Let's go crazy" ha gritado en varias ocasiones. Y los asistentes obedecieron, especialmente en temas como "Basket case" o "When I came around".