Todas las personas tenemos derecho a la protección de la salud y tenemos el deber de cuidar de ella. La Organización Mundial de la Salud señala que el derecho a la salud y otros derechos humanos relacionados con la salud son compromisos jurídicamente vinculantes consagrados en los instrumentos internacionales de derechos humanos.
Desde los Institutos Nacionales de la Salud (Estados Unidos) afirman que vivimos en una época en que las vacunas pueden protegernos de muchas de las enfermedades más graves. Sin embargo, las personas podemos protegernos mediante una alimentación balanceada, realizan ejercicio de manera regular, controlando el estrés y descansando de manera adecuada.
Dolores intolerables
Más allá de lo que las personas puedan hacer por su salud, existen situaciones que las condicionan y demanda una visita obligada a un médico. Se trata de los dolores, que en algunos casos resultan crónicos, y que son una señal del sistema nervioso de que algo puede estar mal, sintetiza la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Los dolores crónicos pueden tener una duración de meses o incluso años, por lo que el sufrimiento no sólo es físico, sino que psicológico y emocional. Los expertos afirman que estas dolencias no son exclusivas de un grupo etario y, en su mayoría, están asociadas a enfermedades como esclerosis múltiple, artritis y fibromialgia.
En cuanto a los dolores, no todos tienen la misma intensidad ni duración. Por lo general dependen de la causa y también de la persona que lo padece. Sin embargo, esta problemática de salud está bien identificada cuando se trata de enmarcarla entre las afectaciones más comunes a nivel mundial. A continuación, te contamos cuáles son los 3 dolores más difíciles de tolerar en el cuerpo humano:
Ciática: se trata de un dolor descrito como una punzada que comienza en la espalda y se extiende hasta el pie.
Quemaduras: aquellas que son de segundo y tercer grado afectan las capas más profundas de la piel por lo que el dolor es persistente.
Migrañas: estos dolores, que pueden durar horas o días, se concentran en un lado de la cabeza y pueden estar acompañados de vómitos, sensibilidad a la luz, náuseas y sensibilidad al ruido.