Juan Soler y Maki, se separan

Terminan matrimonio de 15 años

Los Ángeles. - El actor argentino Juan Soler y su pareja sentimental Maki Soler anunciaron de manera pública su separación tras 15 años de matrimonio en una decisión “muy meditada”, y la que es ajena a terceros, informaron a través de un comunicado.

“Por medio del presente comunicado queremos compartirles la decisión tomada como pareja de mutuo acuerdo, muy meditada, desde el cariño y respeto que nos tenemos, (debemos) poner una pausa en nuestro matrimonio. Separarnos y darnos un tiempo”, dice el texto.

Juan y Maki señalaron que la separación no se debe a una tercera persona, sino a problemas relacionados con la distancia.

“Esta decisión es completamente ajena a terceras personas. Nuestra relación sufrió una fractura debido a la distancia que se mantuvo a causa de los proyectos que ambos realizamos en diferentes países”, explicaron.

“El mantener una distancia constante no fue favorable para nuestra relación. Este proceso es difícil para ambas partes y pretendemos transmitirlo pidiendo respeto, discreción y cuidado para preservar el bienestar de nuestras hijas que siempre serán nuestra prioridad”.

“Agradecemos a nuestro público y a los medios de comunicación su comprensión y respeto ante esta situación, ya que no hablaremos más de este tema”, finalizaron los Soler, que en 2003 se casaron y procrearon dos hijas: Mía y Azul.

Los actores reconocieron que es un momento difícil para ambos, pidieron respeto y agradecieron al público y a los medios por el apoyo y la comprensión.

PAREJA

La pareja se casó en 2003, para 2004 recibieron a su primera pequeña, Mía, y en 2007, nació Azul. La pareja parecía mandada hacer y su amor parecía muy sólido.

Juan Soler, conocido por sus papeles de galán en más de 20 telenovelas, entre ellas “Cañaveral de pasiones” y “Pueblo chico, infierno grande”, comenzó su carrera en su Argentina natal y después la desarrolló hasta convertirse en uno de los referentes masculinos del género en México.

Maki, nacida en Buenos Aires, comenzó como modelo y ya había trabajado como la villana juvenil en telenovelas como “Amigas y rivales” y “El juego de la vida” cuando se casó con Soler. Tomó la decisión de poner a un lado su carrera un tiempo y dedicarse a la familia.