Karla Sofía Gascón muestra su lado más vulnerable en MasterChef

CIUDAD DE MÉXICO, octubre 10 (EL UNIVERSAL).- Karla Sofía Gascón, la participante más controversial de "MasterChef Celebrity", mostró este domingo una faceta desconocida, luego de que se conmoviera hasta las lágrimas por los buenos comentarios que recibió por parte de la y los jueces del reality show de cocina por dominar la preparación de un platillo tradicional japonés, pues aseguró que no está acostumbrada y tampoco le gusta ser reconocida cuando hace las cosas bien.

En el octavo episodio de "MasterChef Celebrity", las y los famosos tuvieron que vestirse con la bandera de diferentes regiones del mundo, pues llegó el momento de que demostraran su conocimiento sobre cocina internacional, pero antes de que a cada integrante se le asignara una comida típica de un determinado país, todas y todos tuvieron que preparar Tendon, un platillo tradicional japonés, compuesto de arroz y verduras freídas al estilo tempura.

Para lograr este cometido, las y los concursantes de la cocina más famosa de México tuvieron una clase magistral con el chef Yasuo Asai, quien les enseñó a dominar este platillo de tazón a través de una técnica milenaria, clásica de Japón, y con la que tenían que tener mucho cuidado, pues si llegaban a entorpecer uno de los pasos, cabía la posibilidad de que no acabaran la preparación a tiempo.

Fue así que el chef Asai les indicó que debían poner a hervir el arroz por 30 minutos, luego les explicó que debían mezclar sake dulce, salsa de soya y azúcar, el cual debía de cocinarse a fuego lento para, posteriormente, agregar un trozo pequeño de alga para crear una salsa tipo teriyaki. Otro de los procedimientos importantes –destacó- es cortar las verduras; crisantemo, calabaza, pimientos o berenjena, en forma de abanico y, por supuesto, limpiar minuciosamente los camarones que serían empanizados con agua y harina.

Pero el reto no sería tan sencillo como seguir paso a paso las instrucciones de Yasuo Asai, pues tendrían que trabajar en equipo, ya que la comunidad es uno de los valores característicos de la cultura japonesa, por lo que tendrían que repartirse de cinco en cinco ingredientes, para que cada una y uno pudiera lograr la preparación del Tendon. Pero eso no sería todo, pues se enfrentarían al paladar el embajador de Japón en México, Noriteru Fukushima, quien evaluaría la calidad de cada platillo.

Al principio del reto, Karla Sofía tuvo una llamada de atención de la chef Betty que le expresó que no evitará que la olla express sonará y hasta en ese momento seguía manteniendo en pie la rectitud que la caracteriza, al opinar que las y los concursantes que ya no pueden cumplir con las especificaciones de la cocina debían de retirarse, mientras que aquellas y aquellos que superan los retos eran quienes merecían seguir en la competencia.

"Si no puedes hacer las cosas, bye, fenomenal, a casa, y si las haces bien que ganes y punto", expresó.

Gascón utilizó con calabaza y crisantemo; mientras trabajaba en la tempura de los vegetales, la actriz compartió al embajador Noriteru que practicaba el budismo japonés, al grado de que enunció un mantra budista que dejó impresionado al invitado a la cocina de MasterChef, gesto que Ricardo Peralta interpretó como una clase de compra de votos, pues consideró que la competidora buscó puntos para agradar a Fukushima.

Con estrategia o sin ella, el plato de Karla Sofía fue uno de los que los chefs probaron al frente de la cocina, pues parecía ser uno de los que tenía más potencial. Entre los comentarios que recibió la actriz de 50 años fue que cómo era posible que, siendo española, pudiera dominar de manera correcta la preparación del tempura. Otro de los puntos a favor fue que siguió al pie de la letra cada uno de los pasos, sin agregar una preparación por cuenta propia.

"Toma nota porque por ese camino vas bien", le expresó el chef Pablo Albuerne.

Por su parte, el chef JoséRa le dijo que si seguía esforzándose como hasta ahora lo ha hecho, le gustaría verla llegar a la recta final del reality, palabras que conmovieron a Gascón al grado de llegar a las lágrimas, pero que trató de evitar que bajaran por sus mejillas, pues confió que no le gusta que la alaben.

"No soy una persona que le gusten las alabanzas, ni recibir. Nunca he sido una persona de recibir, entonces sí me cuesta mucho, no me gusta creérmelo". Lo que sí recibió fue los abrazos de la chef Betty y el chef Pablo, además de ser llamada a subir al balcón de forma directa por ser la mejor en este reto.